La joven electrocutada en Santiago murió al tocar a la vez la farola y una valla metálica

Xurxo Melchor
xurxo melchor SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Atlas TV

El Concello de Santiago pide un informe para aclarar el fallo del alumbrado público

16 sep 2014 . Actualizado a las 14:55 h.

El alumbrado público falló en el barrio compostelano de Vite. Eso es un hecho, y la trágica consecuencia ha sido la muerte de la niña de 14 años Anna Nieto Lago, vecina de Brión (A Coruña). La cuestión que debe ahora aclararse es por qué se produjo esa fatal disfunción. El Concello de Santiago exigió ayer mismo un informe a la empresa concesionaria, del grupo Ferrovial, para que aclare con urgencia qué pasó la madrugada del domingo al lunes para que la pequeña recibiese una descarga eléctrica al tocar una farola.

Pendiente aún de determinarse la causa del fallo que hizo que la farola soltase una descarga eléctrica, las primeras hipótesis de los investigadores consideran que fue un cúmulo de circunstancias lo que hizo que la electrocución fuese mortal. Anna había acudido a las fiestas de Guadalupe junto a unas amigas. En torno a la una de la madrugada decidió cruzar un parque infantil buscando un lugar apartado en el que orinar. El recinto está rodeado por una valla metálica que la menor quiso saltar y para ayudarse se apoyó en la farola. En ese mismo instante recibió la descarga y su cuerpo saltó hacia atrás.

Las primeras hipótesis apuntan a que la casualidad de que tocase el metal de la farola, en la que se produjo la descarga, y a la vez la valla metálica, junto a que tenía los pies mojados, hizo que el desenlace fuese mortal. El cuerpo de la niña habría actuado como conductor de la electricidad y el hecho de que la valla sea de tan grandes dimensiones agravó aún más las consecuencias del calambrazo.

Era la 1.05 horas cuando el servicio de emergencias 112 Galicia recibió la primera llamada de aviso. Varias patrullas de la Policía Local acordonaron la zona en la que había tenido lugar el accidente y un equipo médico con una ambulancia medicalizada atendió a la joven. Trataron de reanimarla durante más de una hora, pero no pudieron hacer nada por salvarle la vida.

En el momento en el que se produjo el siniestro actuaba la orquesta El Combo Dominicano. Las fiestas de la Guadalupe habían atraído a una gran cantidad de personas, muchas de ellas jóvenes. La gran mayoría, ajenos a lo que había sucedido porque el siniestro tuvo lugar cerca del parque infantil, fuera del recinto en el que se celebraba la verbena. Un hecho que corroboró ayer la presidenta de la comisión organizadora, Montse Brea, que descarta por tanto que la instalación eléctrica de las barracas o el palco hubiese podido tener algo que ver en el suceso y explica que «aquello es alumbrado público y no está ni tiene nada que ver con la fiesta».

Una vez que se confirmó la trágica noticia, pasadas las 2.30 horas, la orquesta decidió suspender la actuación. La música paró y la fiesta cesó. En el lugar de los hechos se personaron el alcalde, Agustín Hernández, y el concejal de Seguridad Ciudadana, Alejandro Sánchez Brunete. Ambos acompañaron a la familia de la niña en los tan terribles momentos por los que tuvieron que pasar ayer.

Ni cables ni desperfectos

La farola en la que se produjo la fatal descarga eléctrica que acabó con la vida de Anna Nieto tenía la tapa de registro colocada, no había cables expuestos en el exterior y todo parecía estar en buen estado. Al menos externamente. Lo que haya producido el fallo está sin duda oculto y es lo que ahora deben determinar los peritos de la empresa concesionaria, que estuvieron en el día de ayer analizando la instalación junto a los agentes de la Policía Científica en los que ha recaído la investigación.

«La tapa de registro estaba puesta. No se sabe lo que ha pasado, pero la verdad es que no habíamos recibido ninguna queja por el mal mantenimiento de esa farola y nosotros tampoco habíamos visto nada raro», afirma la presidente de la asociación de vecinos, Isolina Barreiro.

El Concello de Santiago confirmó ayer que no tienen constancia de ninguna denuncia vecinal en la que se alertase de fallos de funcionamiento en la farola, un extremo que han revisado ayer varios departamentos municipales para intentar dilucidar si hubo o no avisos previos que hubiesen podido impedir la trágica muerte de la chica.

Este diario contactó ayer con la empresa concesionaria del alumbrado público en Santiago, que pertenece al grupo Ferrovial, que sin embargo eludió pronunciarse sobre el fallo mortal en una instalación de cuyo mantenimiento es responsables. El Ayuntamiento sí confirmó que la farola contaba con certificado de revisión hasta el 2016 y que la compañía cumple con la normativa.