El marido de la asesinada en Venezuela planeó el crimen para cobrar el seguro

Pedro García Otero CORRESPONSAL / CARACAS

GALICIA

El lucense, que confesó ser el autor intelectual del asesinato, iba a pagarles 2.000 euros a los cuatro sicarios que mataron de un tiro a la mujer de 35 años

19 dic 2014 . Actualizado a las 03:02 h.

El gallego Jesús González Quinta, natural de Antas de Ulla (Lugo) aunque residente en Madrid desde hace diez años, fue detenido ayer por la mañana en Venezuela por la presunta autoría intelectual del asesinato de su esposa, la paraguaya residente en España María Liz Cristaldo López, de 35 años. González Quinta, de 34 años, que al parecer confesó el crimen ante las autoridades policiales del estado de Zulia, acordó, con las cuatro personas que asesinaron a María Liz, pagarles 2.000 euros por cometer el crimen, con la esperanza de cobrar 100.000 del seguro de vida que la joven había adquirido en España, según indicó Jairo Ramírez, secretario de Seguridad Ciudadana de Zulia.

González y Cristaldo, que se habían casado hace tres meses, llegaron a Caracas el 4 de noviembre, con la intención, según había afirmado inicialmente el lucense, de viajar, primero a Cartagena de Indias (Colombia) y de allí hasta Paraguay. Hace exactamente una semana llegaron en autobús a Maracaibo, a 700 kilómetros al occidente de la capital, Caracas y se hospedaron en un hotel económico del centro de la ciudad.

El lunes por la tarde, cuando supuestamente se dirigirían a la estación de autobuses a informarse de cómo viajar a Colombia, se montaron en un taxi ilegal, que los llevó, en cambio, al barrio La Lechuga, uno de los sectores más pobres y peligrosos de la capital zuliana.

Allí, siempre según la primera versión de González Quinta, les obligaron a bajar del coche, les quitaron 300 dólares, 100 euros y otros 50 euros en bolívares, la moneda local, así como la cámara de María Liz y otras pertenencias. Luego les obligaron a correr y les dispararon; mientras María Liz recibió un tiro mortal en la cabeza, Jesús solo sufrió una caída.

González quedó hospitalizado en Maracaibo con un esguince y varios moratones, y aparentemente en estado de shock, mientras insistía en que quería irse lo más rápido que pudiera de Venezuela, y repatriar el cadáver de su mujer. De hecho, hoy mismo tenía previsto aterrizar en A Coruña, con un billete de avión que le había comprado la familia.

El apuro resultó sospechoso a los investigadores del caso, mientras la policía actuaba con rapidez porque la asesinada era una turista. En menos de 24 horas fueron detenidos los cuatro supuestos autores materiales del asesinato, entre ellos una mujer y un menor de edad, a quienes se les incautaron pruebas de interés criminalístico relacionadas con el homicidio. En total se realizaron 18 registros para lograr las detenciones.

Entre estas pruebas se encontraron, indicaron fuentes de la investigación, llamadas cruzadas entre los móviles de los perpetradores y el que usaba González Quinta en el país. Sometido a la presión de los interrogatorios, señalaron las fuentes, el presunto autor intelectual del asesinato confesó. No se ha determinado, señaló el secretario de Seguridad Ciudadana zuliano, si González Quinta será juzgado en Venezuela o si, por lo contrario, será extraditado a España.

En las próximas horas se espera que el gallego arrestado sea puesto a disposición de la Fiscalía local.