El atracador, horas antes de maniatar y encerrar en el baño a la empleada de la limpieza, fue un cliente más de la cervecería Juan Má
26 ene 2015 . Actualizado a las 09:44 h.El atracador, horas antes de maniatar y encerrar en el baño a la empleada de la limpieza, fue un cliente más de la cervecería Juan Má, en la calle Filipinas, en A Coruña. Un buen cliente que consumió, pasó horas ahí y metió en la máquina tragaperras la nada despreciable cifra de 400 euros. Luego se fue, pero regresó nada más cerrar. Inmovilizó con bridas a la mujer que limpia el establecimiento, vació la tragaperras y se llevó los 600 euros de la caja. Ya fue detenido. Se trata de un viejo conocido del barrio de los Mallos y de la policía. No hacía ni un mes que había salido de prisión.
El atraco sucedió sobre las 5.30 de la mañana. A esa hora, la mujer encargada de la limpieza abrió el negocio y entró. Dejó la verja entreabierta y a los pocos segundos accedió el atracador. Con un cuchillo de grandes dimensiones, amenazó a la trabajadora. Le dijo que si gritaba la apuñalaría. Luego cogió unas bridas y le ató las muñecas a su espalda, para encerrarla en el cuarto de baño. Entonces empezó el registro. Primero destrozó la máquina tragaperras y se llevó todo el dinero. Y luego encontró en un cajón la recaudación del día anterior: 600 euros. Se esfumó del lugar dejando a la empleada encerrada y con las muñecas sangrando debido a lo fuerte que le había apretado las bridas. Después pudo salir del baño y pedir ayuda.