La televisión estatal venezolana acusa al centro gallego de «conspiración»

pedro garcía otero CARACAS / CORRESPONSAL

GALICIA

Las soflamas en un programa llevan a los partidarios del régimen de Maduro a acosar a la Hermandad Gallega y a pedir incluso que se expropien sus bienes

30 mar 2015 . Actualizado a las 13:50 h.

Un programa de la televisión estatal venezolana, emitido el sábado por la noche, acusó a la Hermandad Gallega de Venezuela, principal centro gallego en el país sudamericano, de «servir de centro de conspiración» contra el presidente Nicolás Maduro; y a su presidente, Juan Suárez Lemos, de servir «de puente» entre la Embajada y el Consulado español y Antena 3 para producir En tierra hostil en Venezuela, un programa que muestra la realidad del país -las colas para los productos básicos y la criminalidad- y que ha sido, durante semanas, comentado por los venezolanos, aunque solo pudieron verlo a través del cable y de Youtube.

Mario Silva, presentador de origen gallego del programa La hojilla, que se transmite por Venezolana de Televisión, el canal oficial del Estado, acusó también a la Hermandad Gallega de ser sede «de empresarios que acuden a ella para conspirar [?] es un centro de conspiración del eje Madrid-Miami-Bogotá».

A raíz de la decisión del exjefe de Gobierno español, Felipe González, de ser abogado de Leopoldo López, dirigente opositor preso desde hace un año, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, afirmó que desde estas tres ciudades se conspira contra su mandato.

A Suárez, mientras tanto, Silva lo acusó de poner en contacto a personas que buscaban los productores de En tierra hostil, con el programa televisivo, sin especificar qué delito constituye eso en un país en el que, al menos constitucionalmente, aún está consagrada la libertad de expresión.

PACO RODRÍGUEZ

Campaña mediática

En la misma «conspiración» el presentador de La hojilla colocó a Carlos Ocariz, alcalde del municipio caraqueño de Sucre, cuya policía prestó protección al equipo periodístico de En tierra hostil; y a Juan José Rendón, un asesor político venezolano, expatriado, al que el Gobierno acusa de estar detrás de una «campaña mediática» en su contra.

«Ocariz, si crees que por ser alcalde tienes la potestad de violar la ley y no ir preso estás equivocado (...) Participaste en este bodrio, prestaste seguridad a través de Polisucre, coordinaste con el presidente de la Hermandad Gallega, coordinaste con el presidente de la asociación de centros españoles, y la víctima aquí se llama Miren», afirmó el conductor de La hojilla.

De inmediato, seguidores del Gobierno en las redes sociales comenzaron a bombardear a la Hermandad Gallega, exigiéndole a las autoridades tributarias que revisen las cuentas del club (que es una asociación sin ánimo de lucro); e incluso pidiendo la expropiación de «todas las sedes de los clubes españoles en Venezuela».

En tierra hostil describe, en dos entregas, la crítica situación que atraviesa Venezuela desde el punto de vista de la criminalidad y la economía.

Silva fustigó al programa por no señalar que se había hecho en mayo del 2014, y por supuestamente engañar a una española residente en el país, Miren, descendiente de vascos, que le sirvió de puente con diversas personas que aparecen en el programa, a cambio de hablar de la situación de las expropiaciones a los españoles en el país, tema que finalmente no salió en las entregas del espacio de Antena 3 sobre el país sudamericano.

Miren, además, llevó al equipo de Antena 3, custodiada por funcionarios de la Policía Municipal de Sucre, a Petare, una zona popular en ese municipio caraqueño, donde los vendedores informales tienen todos los productos que escasean en la cesta básica venezolana, a precios elevados.

No responderán

Consultados por La Voz de Galicia, funcionarios de la Hermandad Gallega señalaron que no responderán a las acusaciones hechas por Silva, de las cuales, por cierto, no se ha hecho eco ningún portavoz del Gobierno venezolano. Su página web, sin embargo, se encontraba caída ayer. Las fuentes no supieron explicar la razón, pero descartaron que fuera por causa de un ataque orquestado contra ella.

También aclararon que si se produjo algún contacto con el equipo de Antena 3 debió ser para localizar a Luisa García, la esposa de Juan Cortés, gallego de Cambre y empresario de restauración, desaparecido desde hace tres años, después de ser secuestrado. La esposa de Cortés aparece en el primero de los dos programas hechos en Venezuela.

Silva es una figura polémica, y su programa, La hojilla, fue suspendido después de que se filtrara, en abril del 2013, una grabación en la que el presentador le departe con autoridades cubanas sobre la situación del país; en ella, llama «corrupto» a Diosdado Cabello, segundo de la revolución bolivariana tras la muerte de Hugo Chávez, quien era el principal valedor del presentador televisivo. En varias oportunidades, Chávez (de quien muchos sospechaban que expresaba a través de Silva lo que no podía decir personalmente) decía a menudo que La hojilla era su programa favorito.

Nunca hubo una versión oficial sobre la suspensión del programa, apenas una semana después de que se filtrara el audio de Silva. Desde febrero, sin embargo, reapareció en un formato semanal, los sábados por la noche. Sin tapujos, el presentador insulta a personalidades de la oposición, llamándolos homosexuales, ladrones, como en el caso del presidente-editor del diario El Nacional, Miguel Henrique Otero, a quien dirigió muy graves insultos.

Ayudas de la Xunta para los emigrantes

La Xunta, a través de la Secretaría Xeral de Emigración, anunció que ha renovado sus acuerdos con las entidades que ayudan a los gallegos más desfavorecidos en Venezuela, dado el «delicado momento» que vive el país. La ayuda, que se presta a través de la Fundación España Salud y la Hermandad Gallega de Venezuela, es de 600.000 euros, para atender a los 46.000 gallegos que viven en ese país y que, en algunos casos, están en condiciones precarias, explicó Antonio Rodríguez Miranda, secretario de Emigración.  

Rodríguez se encuentra en Caracas ratificando los acuerdos con la Hermandad, y la Xunta explicó que el objetivo es que se mantenga la ayuda. «Galicia tiene ojos y manos en Venezuela para ayudar a los que más lo necesitan, y esos ojos y manos son precisamente las comunidades gallegas presentes en el país», dijo el funcionario.