Condenan a 22 años a un lucense que planeó la muerte de su mujer en Venezuela

EFE

GALICIA

CEDIDA

Jesús González Quinta admitió ser el inductor del asesinato de Marái Liz Cristaldo López en diciembre del año 2014

02 jul 2015 . Actualizado a las 22:48 h.

La justicia venezolana condenó a más de 22 años de prisión al gallego Jesús González Quinta tras admitir su responsabilidad como inductor del asesinato de su esposa, la española-paraguaya María Liz Cristaldo López, durante unas vacaciones en el país caribeño, informó la Fiscalía.

«Fue condenado a 22 años, dos meses y 20 días de prisión Jesús González Quinta, quien admitió su responsabilidad en la muerte de su pareja, la turista española María Liz Cristaldo López (35), ocurrida el 15 de diciembre de 2014 en Maracaibo, estado Zulia», señaló el Ministerio Público (MP) a través de un comunicado.

El hombre, de origen lucense, recluido en el Centro de Arresto y Detenciones Preventivas El Marite, una penitenciaría de la ciudad de Maracaibo, al oeste de Venezuela, fue condenado por la comisión de los delitos de «femicidio agravado en grado de determinador (inductor)», asociación para delinquir y simulación de hecho punible.

Por este delito hay procesos judiciales abiertos contra otras 11 personas presuntamente involucradas en este hecho y que se encuentran detenidas en el mismo centro. A todas se les atribuye haberse asociado para acabar con la vida de Cristaldo, de origen paraguayo y con nacionalidad española, al parecer para cobrar un seguro de vida.

De acuerdo con la investigación de la Fiscalía venezolana, la pareja que había llegado al país caribeño desde España en diciembre del 2014, salió del hotel donde se hospedaba en la ciudad de Maracaibo y solicitó el servicio de un taxi. Luego, «el taxista desvió la ruta y llevó a la pareja a un terreno enmontado (boscoso) (...), donde aguardaban dos hombres armados que procedieron a despojarlos de sus pertenencias». «Cuando Cristaldo y González trataron de escapar, los hombres le dispararon a la mujer y le causaron la muerte», según el relató de la Fiscalía.

En un primer momento, González contó a la policía que el conductor del taxi les había trasladado a un lugar en el que otros maleantes les esperaban y que, tras robarles, les instaron a abandonar el lugar corriendo y sin mirar atrás, mientras les disparaban. Tres días después del hecho, la investigación del caso dio un giro inesperado cuando fuentes de la Policía científica venezolana informaron de que el cónyuge de la española había planeado el homicidio en España con un cómplice, quien le delató e informó sobre el móvil del crimen tras ser interrogado.