«Con un brote, la persona tiene de pronto delirios o alucinaciones»

maría santalla REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

«Un paciente con seguimiento médico tiene menos posibilidades de recaer», asegura Manuel Serrano

28 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Manuel Serrano, jefe de Psiquiatría del Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña explica qué es y cómo se trata un brote psicótico.

-No es una enfermedad, es un grupo genérico de enfermedades mentales que se caracterizan por delirios y alucinaciones. La más importante es la esquizofrenia, pero no es la única. Normalmente estas enfermedades cursan con brotes, tienen períodos de estabilidad y si los pacientes no están bajo tratamiento pueden tener brotes. Un brote significa que de pronto la persona tiene delirios o alucinaciones. Un delirio puede ser que piensa que quieren hacerle daño, y entonces la persona actúa. O puede tener alucinaciones, que oye que están diciendo cosas o que siente que le están haciendo cosas.

-¿Se pueden controlar?

-Mientras tienen tratamiento está controlado, pero si por cualquier cosa dejan el tratamiento pueden llegar a tener episodios críticos. No sabemos las circunstancias exactas de este caso, y tampoco se puede decir tajantemente que si una persona está a tratamiento no va a ocurrir un suceso como este, pero sí es bueno saber que un enfermo a tratamiento y con seguimiento médico tiene menos posibilidades de recaer.

-¿Es habitual que los pacientes dejen los tratamientos?

-Estas personas suelen tener tratamiento, y están controladas y estabilizadas. Lo que ocurre es que una idea delirante es una idea que la persona cree cierta, que es irreductible a la argumentación lógica. Por tanto, la conciencia de enfermedad es muy complicada en los primeros episodios, es muy difícil tenerla y someterse a tratamiento cuesta. Con el tiempo acaban teniendo conciencia de los problemas y sí hacen tratamiento, porque se sienten mejor.

-La medicación ¿es efectiva?

-Hoy día hay tratamientos muy buenos, que permiten controlar los efectos y que además son tratamientos de acción prolongada, con una inyección al mes o cada quince días, y próximamente la habrá de tres meses. Claro que hay que preocuparse de que vayan a ponerse la inyección, pero en Galicia en general hay dispositivos de control. Si no van a ponerse la inyección se les llama.