Decenas de playas de Galicia se quedan desde hoy sin socorristas

Laura García del Valle
laura g. del valle REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Playas con socorristas en septiembre
La Voz

Casi ningún arenal tendrá servicios de salvamento después del día 15 de este mes

01 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Eran pocos y a partir de hoy serán aún menos. Muchos de los escasos socorristas que llevan semanas peinando las playas gallegas dejaron ayer de formar parte de los equipos de salvamento de arenales de enclaves tan concurridos como Valdoviño, Malpica, O Grove o Baiona. Así, de cara a los próximos días, aquellos que quieran aprovechar la influencia anticiclónica, no dispondrán de servicios de socorrismo en playas turísticas como Arou (Camariñas), Rebordelo (Cabana de Bergantiños); que acarrean cierto grado de peligrosidad como las de Barreiros o a Marosa (Burela) debido al imponente oleaje; o en algunas masificadas como las de Nigrán y Baiona.

Esta situación no entiende de afluencia, ya que en el epicentro del turismo de sol por excelencia, Sanxenxo, de los trece arenales que tenían vigilancia ya no la tendrán Major, Baltar, Caneliñas, Paxariñas, Bascuas, Pragueira, Foxos y Lapa. Pero tampoco entiende de clima, ya que a pesar de los pronósticos que aventuran una semana de tiempo espléndido, pocos son los concellos que han decidido tomar cartas en el asunto y prolongar la permanencia de los equipos de salvamento.

Subvención de la Xunta

«Los ayuntamientos que reciben una subvención de la Xunta la consiguen por dos meses, con lo que independientemente del clima, cuando se acaba el período de trabajo, casi nadie les renueva el contrato». Nuria Rodríguez, presidenta de la Federación de Salvamento de Galicia, afirma que el buen tiempo que ha hecho este verano en la comunidad, por extraordinario, ha pillado desprevenidos a muchos concellos que tendrían que haber ampliado los contratos de sus socorristas. Además, asegura, «muchas corporaciones no están preocupadas por este tema», a pesar de la llamativa falta de servicios en las playas gallegas que ha acarreado, entre otras cosas, que catorce playas hayan perdido banderas azules -el buque insignia de la comunidad hasta el año pasado al contabilizar el mayor número de estandartes de España-.

«El domingo ya quedarán pocas playas con socorristas, si hubiera una legislación que lo regulara...», plantea Rodríguez. A pesar de que la mayoría de corporaciones locales no destinarán ni un euro más de sus arcas municipales a ampliar los contratos de estos profesionales, no todos han seguido esta premisa. Tal es el caso de Pontedeume. En la playa de Ber estaba previsto que los socorristas culminaran sus funciones hoy, dado que era el día que se vencía el plazo de ayudas de la Xunta. Sin embargo, el concello ha optado por ampliar los servicios hasta el día 18 echando mano de recursos propios.

Los que estarán en septiembre

Hay un reducido número de ayuntamientos que, contra la tónica general, mantendrán sus servicios de salvamento hasta la última semana o incluso el último día de septiembre. En Poio y Cangas, por ejemplo, los socorristas que llevan todo el verano velando por la seguridad de los bañistas se quedarán hasta el día 30. Situación similar a la que se podrán encontrar los veraneantes en las playas de Fisterra, donde también habrá seguridad hasta que termine el mes, y a la de Mugardos, donde un socorrista -hasta el día 4 habrá dos- estará atento a cualquier incidencia en la playa de Bestarruza hasta el próximo 25 de septiembre.

Hasta mediados de este mes también tendrán socorristas las playas de Ferrol, Dumbría, Ponteceso -aunque dos profesionales dejaron de prestar sus servicios el pasado fin de semana-, Cee, Vilagarcía, Cangas, Bueu, Arteixo, A Coruña -y su área metropolitana- y Bueu. En Vigo, por su parte, los socorristas seguirán también hasta el día 15 vigilando una decena de playas en la ciudad y en las islas Cíes, conforme al calendario que habitualmente aplica el Concello vigués. No obstante, hay diferencias en la intensidad de la vigilancia, ya que en la segunda quincena de junio y en la primera de septiembre se reducen los horarios, que son más amplios en julio y agosto.

Qué hacer en un arenal en el que no hay salvamento

MONICA IRAGO

«Haya socorristas o no, el riesgo cero no existe». José Antonio Argibay, técnico de operaciones de la Axencia Galega de Emerxencias es tajante: lo idílico es que uno acuda a una playa y en el arenal se extreme la vigilancia, pero «la responsabilidad comienza en uno mismo». Así, ante cualquier espacio acuático natural, Argibay recomienda, ante todo, «conocer la zona», con más razón si el lugar carece de servicios de salvamento.

«Existen medidas de autoprotección que deben adoptarse siempre». Entre ellas, enumera, es imprescindible hacer un balance de cómo está el mar: las corrientes, la profundidad o saber si en esa zona se realizan actividades de pesca. Además, añade, «casi nadie lo cumple, pero es importantísimo no bañarse solo: si tienes un problema en el agua, de esta manera, siempre tendrás a alguien que te eche una mano». Y mantener la calma en caso de que se produzca algún incidente. Siempre hay que intentar estar tranquilo y nadar a favor de la corriente: «El mar no se cansa, yo sí», explica el experto.

A mayores, Argibay considera indispensable que cada uno sea responsable de sus capacidades y que no intente ayudar sin conocimiento. «Ante la mínima duda, lo mejor es llamar al 112», asegura.

Desde junio han muerto por ahogamiento diez personas en las playas gallegas

Una decena de personas murieron ahogadas desde el 1 de junio en las playas gallegas, la última el pasado 6 de agosto en la playa canguesa de A Rodeira. Esta cifra, sumada a que de esas víctimas seis perecieron en arenales sin servicio de salvamento, no ha hecho más que elevar la voz de alarma sobre una situación que, este verano, se ha convertido en una lacra. Y es que la ausencia de socorristas supone un déficit en la seguridad de los bañistas que personal del medio, federaciones e incluso corporaciones locales se han encargado de remarcar.

Otras causas

A las muertes por ahogamiento hay que añadir aquellas ocurridas en el mar que no están directamente relacionadas con esta causa. En algunos casos, como ha remarcado la Axencia Galega de Emerxencias, los fallecimientos se produjeron por ataques al corazón o paradas respiratorias que tuvieron lugar cuando las personas se encontraban en el agua. En otros casos, la resaca o el oleaje fueron los principales culpables de las muertes.

Con información de R. Domínguez, C. Elías, I. Romero, E. Silveira, I. Eiroa, M. Cuadrado, M. Hermida, J. Fuentes, M. Torres y T Longueira