La primavera: temperaturas más cálidas y la lluvia habitual

m. carneiro A CORUÑA / LA VOZ

GALICIA

monica ferreiros

De cumplirse las predicciones, las precipitaciones aliviarían el déficit hídrico acumulado entre diciembre y marzo

22 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La primavera transcurrirá en Galicia con temperaturas superiores a los valores normales y lluvias sin «diferencias significativas» de la media, según la predicción estacional de la Agencia Estatal de Meteorología divulgada ayer en A Coruña. En la presentación de los datos del invierno que acaba de concluir, el delegado territorial, Francisco Infante, subrayó que «no sería mala noticia» la confirmación de las lluvias para los próximos meses, ya que «aliviaría el déficit hídrico» acumulado desde diciembre hasta marzo, un período entre seco y muy seco en el que las lluvias apenas cubrieron el 60 % de los valores normales en Galicia. Hay que recordar que el balance hídrico computa de octubre a septiembre del año siguiente. En el caso gallego, diciembre fue el tercero menos lluvioso de la serie histórica, correspondiente a los últimos 50 años, detrás de los de 1991 y 1988.

Inicios inestables

En cuanto al pronóstico para los próximos tres meses, Francisco Infante recordó que este tipo de previsiones estacionales «tienen una fiabilidad no muy alta» por sus expectativas a partir de modelos estadísticos. Con todas las reservas, en principio se espera que la primavera sea algo más cálida de las registradas en el pasado pero con un nivel de precipitaciones medio. «Es una época -recordaba Infante- muy lluviosa, aunque no tanto como el final del otoño y el invierno, pero también es habitual la lluvia». Otra cosa muy común es la inestabilidad, sobre todo a principio de la temporada: «En el final del invierno y las primeras semanas de la primavera suele haber cambios bruscos de temperatura, donde se alternan episodios invernales con otros más cálidos», como los de las últimas semanas.

En el encuentro de ayer en Aemet también se hizo un balance del invierno que acaba de terminar. Se detectaron anomalías en las temperaturas, que discurrieron por encima de las medias en diciembre y febrero, compensando los rigores de enero, cuando sucesivas masas de aire muy frío de origen continental alcanzaron la Península.

Veinte grados en diciembre

Por meses, diciembre fue cálido en toda Galicia, en especial entre los días 4 y 6, cuando se superaron los 20 grados centígrados en varios puntos, mientras que las mínimas se registraron los días 19 y 31, en especial este último con -7,7 grados en Verín (Ourense), y la racha máxima de viento fue en Fisterra (A Coruña), con 116 kilómetros por hora.

Enero fue frío debido a las masas de aire continental que llegaron del nordeste y dieron las temperaturas más bajas los días 19 y 20 (-6,3 y -3, en Ourense y Lavacolla, respectivamente). A pesar de que fue seco, las lluvias registradas en los tres últimos días del mes sumaron 73,8 litros por metro cuadrado en veinticuatro horas en algunos puntos.

Febrero fue cálido, con una máxima en Ourense el día 22 de 23,8 grados centígrados. Asimismo fue un mes «húmedo o muy húmedo debido a los temporales que afectaron entre los días 2 y 5», que llevaron hasta 298,6 litros por metro cuadrado en tres días a Beariz (Ourense). La racha de viento más alta fue en Fisterra el 3 de febrero, cuando la velocidad del aire llegó a los 189 kilómetros por hora. Marzo, de momento, ha llegado con una «primavera anticipada».

La media invernal en Galicia fue al final de 7,4 grados (0,7 por encima de lo normal), con una máxima absoluta de 23,8 grados el 22 de febrero en Ourense, y mínima de -11,8, el 19 de febrero en Xinzo de Limia.