El PSOE llevará al Senado el AVE gallego y la financiación, para espolear al PP

GALICIA

Domingos Sampedro

Álvarez Areces quiere que las reivindicaciones de Galicia lleguen a la Cámara Alta

23 mar 2017 . Actualizado a las 23:56 h.

«Venimos aquí a reivindicar lo que nos falta». Con estas intenciones se plantó ayer en Santiago el portavoz de los socialistas en el Senado, el asturiano Vicente Álvarez Areces, empeñado en que las demandas políticas de Galicia se escuchen en Madrid, también a través de la Cámara Alta, con el fin de espolear al PP y al Gobierno de Mariano Rajoy. El expresidente del Principado es consciente de que los populares tienen mayoría absoluta en el Senado, pero resaltó que, al carecer de ella en el Congreso, se abre un espacio para el «entendimiento» que puede ser beneficioso para las iniciativas impulsadas desde la comunidad. Así que en el menú introdujo ya algunos asuntos, como la reivindicación del AVE gallego o la mejora en la financiación para prestar los servicios públicos con garantías.

En el marco de los encuentros territoriales que está teniendo por toda España, Álvarez Areces visitó el Parlamento gallego acompañado de los cuatro senadores socialistas de Galicia, el diputado coruñés en el Congreso, Ricardo García Mira, y parte de la dirección del grupo del PSOE en la Cámara Alta. Todos ellos mantuvieron un encuentro de trabajo, durante más de dos horas, con el portavoz del PSdeG en O Hórreo, Xoaquín Fernández Leiceaga, varios diputados autonómicos y Manuel Mirás, alcalde de Oroso, en calidad de vicepresidente de la Fegamp.

Pese a que Areces admitió que el Senado no tiene mucha visibilidad, dijo que su grupo político asumió el reto de convertirlo en una cámara «fundamental para la convivencia en nuestro país y para servir a los ciudadanos», haciendo de ella una caja de resonancia de las demandas políticas que se puedan plantear desde las comunidades autónomas.

Puso en valor que el Senado inició la actual legislatura asumiendo un rol más activo, con la reunión de la Conferencia de Presidentes y la negociación de posiciones que están llamadas en desembocar en pactos de Estado, como el de la educación o el de la lucha contra la violencia de género, al que Galicia también envió su aportación.

El portavoz ante la Cámara Alta expresó su deseo de poder «coordinar» las iniciativas que defienda el PSOE en Galicia con las que se promuevan en el Senado. «Estamos empeñados en llevar los problemas, a luchar por ellos y a hacerlo de forma coordinada», dijo Álvarez Areces sobre las reivindicaciones que se puedan plantear desde Galicia. 

Declive demográfico

Fernández Leiceaga se encargó de desgranar la agenda de cuestiones prioritarias que el PSdeG está en condiciones de trasladar al Senado, que van desde la financiación autonómica, necesaria para prestación de los servicios básicos con plenas garantías, la reivindicación sobre el AVE gallego, los plazos fijados inicialmente y las conexiones con Lugo y Ferrol, pero también el debate que gira en torno al declive demográfico de Galicia y al envejecimiento de la población.

Álvarez Areces no solo hizo suya la aportación de Leiceaga, comprometiéndose a ejercer una «acción directa» en lo relativo a la conclusión del AVE a Galicia, sino que hizo un llamamiento para que esta comunidad trabaje en colaboración con otros territorios del noroeste peninsular, como Asturias, Cantabria o parte de Castilla y León, pues a veces hay problemas que son comunes, como son los atañen a las redes de infraestructuras o a la demografía regresiva.

«Tenemos que rescatar la España de la cohesión social y territorial», añadió Areces, y un buen camino, cree, es defender propuestas compartidas que pueden tener más fuerza política.

El dirigente asturiano llama a los socialistas a recuperar «el sentido de la fraternidad» en el próximo congreso

El expresidente del Principado de Asturias y actual portavoz de los socialistas en el Senado, Vicente Álvarez Areces, asiste con cierta preocupación al enconado debate interno que se vive en el partido con motivo de la celebración de las primarias, y el posterior congreso federal, en que será elegido el próximo secretario general del PSOE. Y en este sentido considera que deben recuperar «el sentido de la fraternidad» para poder trabajar unidos, recuperar la ilusión y defender un programa de progreso, de igualdad y de justicia social.

«Aunque el debate sea intenso y apasionado, no tiene por qué ser sinónimo de división, o al menos no debería serlo», razonó el portavoz socialista en la Cámara Alta, que puso como modelo a seguir el congreso federal del año 2000, «que fue intenso y en el que hubo hasta sorpresa», dijo, con la elección de Rodríguez Zapatero, que compitió con José Bono, Matilde Fernández y Rosa Díez. No obstante, insistió Areces en que hubo una elección en aquel congreso por «escasísima diferencia», pero una vez que el PSOE se dotó de secretario general, «hubo un reagrupamiento del partido para apoyar a la persona elegida», dijo, y entiende que eso mismo es lo que debería ocurrir el próximo junio.

Proceso «con garantías»

Álvarez Areces, que en su momento defendió la abstención del PSOE para facilitar que España tuviera un Gobierno, evitó ayer pronunciarse sobre la persona a la que apoyaría en el proceso interno que celebrará el partido. «Eso ya no forma parte de esta visita», se excusó.

Con todo, defendió que el proceso convocado por la gestora federal, que preside el también asturiano Javier Fernández, es «democrático y apasionante», al tiempo que «cuenta con todas las garantías». Y por eso recetó una cosa a todos sus compañeros: «Respeto», que entiende que «no es obvio» pedirlo.