Podemos no consigue crear la comisión que debería mediar en su crisis interna

Susana Luaña Louzao
susana luaña SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

M.MORALEJO

Los distintos frentes de En Marea tratarán de pactar el domingo una coordinadora

30 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Nombres y cuotas de poder. Esos son los dos motivos que generaron las crisis internas en la nueva política de Galicia. La dirección de Podemos está dividida entre los partidarios y los críticos de Carmen Santos y la constitución de En Marea como partido lleva dos meses paralizada por falta de consenso a la hora de redactar la lista de personas que formarán parte de la coordinadora y, sobre todo, por la oposición de varios sectores -Marea Atlántica y Esquerda Unida, principalmente- a que Luís Villares sea el portavoz del partido. En realidad, en los dos casos se trata de una crisis de liderazgo.

Podemos Galicia, en teoría, debería haber solventado el pasado fin de semana sus diferencias internas, pero no fue así. Se celebró el consello cidadán tutelado por Pablo Fernández, enviado especial de Pablo Iglesias, pero no se llegó a acuerdo entre los dos sectores enfrentados, por lo que se pactó crear una comisión formada por seis miembros, tres del sector oficial y tres de los críticos. Los nombres se iban a dar a conocer al día siguiente, domingo. Pero hoy jueves, todavía no se saben. Pablo Fernández se volvió a Madrid y la dirección autonómica fue incapaz de consensuar los miembros de la comisión, lo que da una idea de la escasa operatividad de ese grupo para solventar las diferencias que hay en el seno de Podemos Galicia en torno a la interpretación de los acuerdos adoptados en Vistalegre II.

En Marea, por su parte, lleva dos meses sin reunir a su recién constituido consello das mareas. Era el primer paso para la formalización como partido del conjunto de fuerzas que decidieron presentarse juntas a las elecciones autonómicas, pero el proceso se quedó ahí paralizado ante la imposibilidad de pactar los nombres de la coordinara que actuará como ejecutiva y de consensuar un portavoz, ante las reticencias de una buena parte de sus miembros de darle más protagonismo a Luís Villares.

Lo van a intentar este domingo. Si consiguen pactar los nombres, se elegirá la coordinadora formada por quince miembros -con representantes de las tres listas que se presentaron al consello das mareas- que se ocuparán de resolver el día a día de los asuntos internos del partido. Menos probable es que de la reunión salga también el nombre del portavoz, otro de los asuntos que levantan ampollas y que divide a quienes creen que Villares debería ser el rostro del nuevo partido y quienes apuestan por una portavocía coral.

Donaciones de los diputados

Otro asunto no menor que se abordará el domingo tiene que ver con las donaciones al partido, una cuestión que abrió una brecha entre los diputados autonómicos; en concreto, con los de Podemos, que, coincidiendo con sus crisis internas, se dividen también entre los que creen que solo deben aportar dinero al partido por el que concurrieron a las elecciones gallegas y quienes defienden que su principal compromiso está con la formación morada de la que proceden. En Marea abrió una cuenta para que los diputados entreguen mensualmente la parte del sueldo que les corresponde según lo que cobra cada uno, pero de momento no hay quien lo fiscalice. Otro asunto para el domingo.

Antón Sánchez será nombrado portavoz el sábado en Teo

Tras la convulsa asamblea de Pontevedra que finalizó con una pelea entre jóvenes de Xeira, el sábado se celebrará en Teo la primera reunión de la nueva coordinadora nacional de Anova, que en principio se prevé más tranquila. En el encuentro se elegirá la nueva ejecutiva y se nombrará portavoz. Previsiblemente será Antón Sánchez, que sustituirá en el cargo a Xosé Manuel Beiras y a Martiño Noriega.