Intensas granizadas acentúan los daños en los terrenos de cultivo

Xoán Ramón Alvite Alvite
X. R. ALVITE RIBEIRA / LA VOZ

GALICIA

Restos de la granizada caída en Mazaricos
Restos de la granizada caída en Mazaricos ALVITE

Los agricultores temen perder la cosecha de maíz que acaba de ser sembrada

01 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Los daños que la inestabilidad meteorológica está causando en los cultivos se vieron acentuados con las intensas granizadas que en la mañana de ayer se registraron en Galicia, especialmente en el sur de la provincia de A Coruña, en las comarcas de A Barcala, Bergantiños, Xallas, Muros, Noia y Barbanza, que ocasionaron oscilaciones en las temperaturas de hasta cuatro grados en escasas dos horas. Los agricultores y ganaderos admiten que, si hasta el momento, habían logrado librarse de los efectos de un raro otoño e invierno inusualmente secos, temen que estas incidencias puedan echar al traste las cosechas.

Las mayores preocupaciones del colectivo ganadero se centran en el maíz, principal producto sobre el que se sustenta la alimentación de las vacas lecheras y que, dependiendo de las zonas, se está sembrando estos días o bien ya empieza a brotar, lo que lo convierte en muy vulnerable a las bajas temperaturas.

Primeras cortas

«É verdade que non choveu moito pero iso non impediu que a maioría tivésemos unha boa primeira corta de herba e, nalgúns casos, tamén unha segunda aceptable. O problema vén agora co millo, non tanto pola choiva, senón polo frío e o pedrazo», apunta Óscar Blanco, presidente de Gandeiros de Mazaricos, la mayor asociación del sector de ámbito municipal constituida en Galicia. Este profesional confirma la existencia de daños importantes en muchas fincas donde el maíz estaba empezando a salir a la superficie y que se vio seriamente afectado por las fuertes heladas de los últimos días y las granizadas de ayer.

Aunque resulta imposible precisar con exactitud la cuantía de los daños, se cuentan por cientos las fincas de las comarcas coruñesas de A Barcala, Bergantiños o Xallas donde el maíz ha sufrido daños de importancia. Ayer mismo, la fuerte granizada causaba desperfectos reseñables en plantaciones de Santa Comba donde el maíz ya superaba los cinco centímetros de altura, por lo que, previsiblemente, deberán realizar una resiembra para garantizar la cosecha de forraje.

Temperatura de la tierra

Además de dañar el maíz que ya está nacido, las bajas temperaturas derivadas de las fuertes heladas y tormentas de granizo también impiden, según los técnicos, la germinación del grano ya sembrado: «Independentemente do tempo que leve sementado, o gran de millo non xermina se a terra non alcanza temperaturas de entre 12 e 14 graos de xeito sostido, co cal esta situación que estamos a sufrir tamén ameaza con botar a perder moitos dos cultivos que xa están sementados», apunta José Manuel García, ingeniero técnico agrícola.

Los datos de las distintas estaciones agrometeorológicas que Meteogalicia tiene repartidas por la comunidad confirman las peores previsiones de los agricultores y ganaderos gallegos en cuanto a la temperatura del terreno. Pues aunque las mediciones se realizan a diez centímetros del suelo, estás difícilmente superan los once grados de media en las principales comarcas agrícolas de Galicia. Si a estos valores se añade que la baja temperatura que registra el rocío -en zonas como Santa Comba cayó por debajo de cuatro grados bajo cero- o las fuertes ráfagas de viento provocan caídas en picado del calor del subsuelo, el panorama es pesimista.