El Consello Económico urge a la Xunta a tomar medidas para frenar el declive demográfico

Mario Beramendi Álvarez
mario beramendi SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

ANGEL MANSO

El organismo consultivo cree que la recuperación no ha servido para revertir las tasas de pobreza

28 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La recuperación económica iniciada en el año 2014 después de seis años de crisis no ha servido para frenar la pérdida de población en la comunidad gallega. Ese es el principal diagnóstico de la memoria anual del Consello Económico Social (CES), avanzada este jueves y en la que el organismo consultivo de la Xunta urge a las Administraciones públicas a tomar medidas que detengan la sangría demográfica.

Concretamente, la institución se refiere a iniciativas «que fomenten incrementos das taxas de natalidade, freen a emigración e favorezan o retorno dos emigrantes», apunta el organismo en su diagnóstico. El CES demanda una estrategia global en favor del desarrollo económico y la recuperación de la población bajo criterios de solidaridad, cohesión social, garantía de prestación de servicios en el rural y fomento del empleo. A su modo de ver, es especialmente preocupante la pérdida de población activa, sobre todo en los jóvenes, bien por la emigración o bien por la falta de relevo generacional en las cohortes de edad (falta de nacimientos).

En su memoria anual, el CES constata la mejoría económica -según el INE, el producto interior bruto (PIB) de Galicia creció un 3,4 % en el 2016, dos décimas más que el español- y el aumento global de la producción, pero cuestiona el modelo de crecimiento, sobre todo por la progresiva desigualdad social y una distribución de los recursos cada vez menos equitativa. En este sentido, el organismo opina que «é necesario intensificar e coordinar medidas entre todas as institucións involucradas na loita contra a pobreza, avanzando cara a unha sociedade máis inclusiva e igualitaria».

Atención a la dependencia

Señala que la reducción de los niveles de pobreza y la consecución de la igualdad social debería estructurarse en medidas que, en todo caso, tienen que incluir la atención a las personas en situación de dependencia y discapacidad y garantizar una financiación suficiente, preferentemente mediante prestaciones de servicios profesionales. En este sentido, el CES recuerda la necesidad de reducir las listas de espera en las personas que, con valoración positiva, siguen sin una prestación, un porcentaje que todavía se sitúa en el 26 % de los dependientes diagnosticados.