Rueda jura como presidente de la Xunta: «Quero achegar o meu gran de area á nobre causa de Galicia»

Xosé Vázquez Gago
X. Gago SANTIAGO

GALICIA

Al acto celebrado en el parque de Bonaval asistieron un millar de invitados entre los que figuran sus tres predecesores en el cargo, el ministro de Transportes, Óscar Puente, el expresidente Rajoy y los mandatarios de Asturias, Castilla y León, Aragón y Murcia

13 abr 2024 . Actualizado a las 19:04 h.

Hoy sábado, en el compostelano parque de Bonaval, ante mil invitados, Alfonso Rueda ha jurado a mediodía el cargo de presidente de la Xunta para gobernar en «interese supremo de Galicia e de España».

El acto comenzó con una ofrenda en el Panteón de Galegos Ilustres, que el presidente depositó acompañado de sus predecesores en el cargo —Fernando González Laxe, Emilio Pérez Touriño y Alberto Núñez Feijoo—, del presidente del Parlamento, Miguel Santalices, y del ministro de Transportes, Óscar Puente, que asistió en representación del Gobierno.

Entre los invitados estuvieron Mariano Rajoy, expresidente del Gobierno, y los mandatarios del Principado de Asturias, Adrián Barbón; de la Región de Murcia, Fernando López Miras; del Gobierno de Aragón, Jorge Antonio Azcón Navarro; y de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco.

Rueda agradeció a Santalices su colaboración para celebrar la toma de posesión en Bonaval, cuando lo habitual desde la era Fraga es que tuviese lugar en el Parlamento. Explicó su deseo de reforzar el contenido simbólico del acto por la cercanía del Panteón, donde descansan Rosalía, Castelao y Brañas, y donde Gerardo Fernández Albor, juró su cargo como primer presidente de Galicia. Recordó que la autonomía gallega era un «soño» no hace tantos años, y elogió el trabajo de todos lo ilustres que han posibilitado el autogobierno. «Fixeron de Galicia a súa causa principal», dijo antes de anunciar que quiere «achegar o meu gran de area a esa nobre causa».

Rueda, de acuerdo con ese sentido simbólico, inició su discurso con una cita de cada uno de sus predecesores. También subrayó que quiere gobernar para todos, y pidió disculpas por adelantado por los errores que pueda cometer. Agradeció el trabajo a todos los conselleiros que le han acompañado y, por adelantado, los que le acompañarán a partir de mañana, cuando está previsto que anuncie su gobierno.

Describió Galicia como una tierra de «concordia», que está «cómoda» en el Estado autonómico y llamó a buscar los que nos une y evitar lo que nos separa.

Pronunció parte de su discurso en castellano, los párrafos referidos al papel de Galicia en España, y advirtió que «los que quieran romperlos [los principios del sistema autonómico] nos tendrán siempre enfrente», pero los que quieran «trabajar unidos tendrán un aliado en Galicia». Su Gobierno, insistió, no reclamará ser «más que otros», pero no tolerará «ser menos que nadie».

Se emocionó las dos veces que habló de su familia, y en especial al recordar a su padre. Dijo que se presentará ante los gallegos sin «artificios nin disfraces», también sin «pompa nin soberbia» porque es «sobre todo o pai de Beatriz e Marta, o fillo de José Antonio e Lola, o marido de Marta, un galego de Pontevedra, un galego coma todos vós», que hoy ha alcanzado «a maior honra» a la que aspira y la mayor que puede pretender un servidor público en Galicia. Por eso, concluyó, toma posesión no solo como presidente de Galicia, sino como «primeiro servidor de todos vós».