La camiseta de Borja Oubiña, a juicio

e. v. pita VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

Oscar Vázquez

El Celta entrega al juez la prenda que el jugador vistió en la Champions del 2004 contra el Arsenal para esclarecer una posible estafa

28 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El Celta quedó eliminado de la Liga de Campeones ante el Arsenal en octavos de final el 10 de marzo del 2004 en una de sus jornadas más épicas de su historia. El mediocampista Oubiña, con el número 28, sudó la camiseta en el estadio del Highury, en Londres pero no pudo ser. Cayeron por 2-0. Al regresar a Vigo, el jugador confió a su madre la vestimenta del mítico partido, que la guardó como oro en paño. En una entrevista del 2006, Oubiña confesaba que solo había conservado la camiseta del encuentro con el Arsenal, ni siquiera tenía la de su debut. Con el tiempo, su colección aumentó.

El ahora miembro de la secretaría técnica del Celta tuvo que volver a su casa familiar a buscar la famosa camiseta porque le fue requerida por orden judicial. Dicha prenda es necesaria para terminar un juicio por un delito de estafa en Vigo.

Resulta que un hincha del Celta presentó una denuncia contra el vendedor de una camiseta de la talla XL con el número 28 que, supuestamente, usó Oubiña contra el Arsenal. El coleccionista la compró en un portal de subastas por 350 euros porque se fio del vendedor, quien aseguraba en el portal de la web que la prenda era original y que incluso podía expedir un certificado de autenticidad a cambio de un extra de 10 euros. Una oferta similar seguía ayer activa en el portal Wallapop aunque con el cartel de «vendida».

Al recibir la prenda en casa, el coleccionista sospechó que lo habían timado. Un indicio era que el parche del logo oficial de la Champions estaba bordado a mano en la manga. Un remiendo demasiado chapucero para la principal competición europea.

El vendedor acabó sentado en el banquillo del juzgado de instrucción número 4 de Vigo. Tras oír los testimonios, el juez Juan Carlos Carballal consideró que no podía dictar una sentencia hasta escuchar el informe técnico del Real Club Celta de Vigo. Por eso requirió a Oubiña que presentase la camiseta original, la cual llegó ayer al juzgado.

Los funcionarios comprobaron algo muy curioso. La camiseta vendida en Internet era de la talla XL pero la auténtica que presentó Oubiña es de menor tamaño, una L. Esta es una de las principales diferencias que ahora tendrá el juez en cuenta antes de reanudad la vista.

La primera parte del juicio se celebró por un presunto delito leve de estafa. La duda no es si la camiseta es falsa sino sobre si es la prenda que se anunciaba.

Cada año, cada jugador del Celta gasta entre 10 y 15 camisetas.