Douvikas, que sustituirá al sancionado Iago Aspas, se erige en el tapado de un duelo marcado por el poderío físico y goleador de Larsen y Sorloth
20 dic 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Strand Larsen y Alexander Sorloth viven a la sombra de Erling Haaland en Noruega, pero los dos están haciendo carrera en el fútbol español y hoy se medirán con el Celta y el Villarreal en el renovado Madrigal. Sin embargo, en medio de las torres vikingas debe emerger un griego con un par de cabezas (de estatura) menos, pero que llegó a Vigo con el aval del gol desde la Eredivisie y que en 300 minutos de liga con los celestes, ha sido capaz de marcar dos goles, aunque ambos con la cruz de la derrota.
«Tenemos que aprovechar la ilusión, fuerza y ganas de Larsen y Douvikas para sacar algo positivo», comentó Rafa Benítez hablando de sus delanteros disponibles, para la contienda que cierra el año. Porque el noruego llega como el pichichi del equipo con seis dianas y el griego jugará su tercer partido como titular aprovechando la ausencia del sancionado Iago Aspas, un jugador fundamental que para el entrenador celestes no parece imprescindible a domicilio; de hecho, lo sentó en dos ocasiones para dar entrada a Douvikas, la última vez, hace menos de dos semanas en Vallecas.
El griego tiene buen golpeo, gol y trabajo, pero todavía está en fase de adaptación a la liga española; en el caso de Larsen, tardó un año en aclimatarse. Tasos venía de Holanda coleccionando goles: nueve en su primera temporada en el Utrecht, su club de procedencia, y 19 el curso pasado, cuando se proclamó pichichi de la Eredivisie. Esas dos decenas de goles fueron la carta de presentación para que el Celta pagase 12 millones por sus servicios. «Siempre he sido muy ambicioso. Este es un gran reto, es una liga de más nivel», comentó el delantero sobre su llegada al Celta y al fútbol español.
Como celeste, tuvo un momento de duda. Su seleccionador le borró de las convocatorias y su entorno deslizó que la falta de minutos en el Celta le pasaba factura a nivel internacional. Ahora, parece que su protagonismo en Vigo va a más. Tuvo media hora en Valencia, salió de cara y jugó 77 minutos ante el Rayo Vallecano y el sábado fue el recambio de Larsen con el último cuarto de partido por delante.
En Villarreal, puede ser el factor sorpresa. Larsen, en un buen momento, acapara el foco, y Douvikas queda en un segundo plano para el equipo de Marcelino, que lleva 33 goles encajados. Lo mismo se puede interpretar al revés. Con Gerard Moreno casi descartado, Sorloth, con sus 196 centímetros (tres más que Strand), se convierte en una gran amenaza, pero un poco más abajo habita el comandante Morales, que lleva cinco goles, solo uno menos que Larsen y su compatriota.
