Vuelo MH370: Desvinculan los restos hallados en una playa australiana del avión malasio desaparecido

EFE

INTERNACIONAL

Consideran poco probable la relación entre los restos y el avión tras analizar las fotografías de los materiales, encontrados a unos 10 kilómetros al este de Augusta

24 abr 2014 . Actualizado a las 17:45 h.

Las autoridades australianas descartaron hoy que los escombros encontrados ayer en una playa del oeste de Australia tengan alguna relación con el avión del vuelo MH370 de Malaysia Airlines desaparecido hace más de seis semanas.

El jefe de la Autoridad Australiana de Transporte, Martin Dolan, considera poco probable la relación entre los restos y el avión tras analizar las fotografías de los materiales, encontrados a unos 10 kilómetros al este de Augusta, en el extremo sur de la costa oeste.

«Hemos examinado con mucha atención las fotografías que tomó para nosotros la Policía y nos satisface que no sean una pista en relación a la búsqueda del MH370», dijo Dolan a la emisora ABC.

«Queremos seguir cualquier posible indicio que pueda ayudarnos a encontrar el vuelo MH370 pero lamentablemente este no nos va a ayudar en esta búsqueda», añadió Dolan.

Mientras, los equipos de rescate retomaron hoy el rastreo submarino en el océano Índico con el vehículo no tripulado Bluefin-21, que realiza hoy la misión número 12 en la zona donde fueron detectadas 4 posibles señales de las cajas negras.

El submarino ha completado el rastreo en más del 90 por ciento de la zona delimitada por la investigación sin que hasta el momento se haya encontrado ningún «contacto de interés», indicó en su último comunicado el Centro de Coordinación de Agencias Conjuntas.

En la búsqueda de hoy, condicionada por la tormenta tropical Jack, también participan 11 aviones militares y 11 embarcaciones que realizarán una búsqueda visual en un área de 49.567 kilómetros cuadrados situada a 1.584 al noroeste de Perth.

El vuelo MH370 de Malaysian Airlines despegó de Kuala Lumpur en la madrugada del pasado día 8 de marzo con 239 personas a bordo y tenía previsto llegar a Pekín seis horas más tarde.

El avión desapareció de las pantallas de control de radar a los 40 minutos de su despegue y cambió de rumbo en una «acción deliberada», según las autoridades malasias, para cruzar el Estrecho de Malaca en dirección contraria a su trayecto inicial.

Viajaban a bordo 153 chinos, 50 malasios, siete indonesios, seis australianos, cinco indios, cuatro franceses, tres estadounidenses, dos neozelandeses, dos ucranianos, dos canadienses, un ruso, un holandés, un taiwanés y dos iraníes que utilizaron los pasaportes robados a un italiano y un austríaco.