Boko Haram irrumpe en una universidad de Nigeria y deja a su paso 13 muertos y 47 heridos

EFE

INTERNACIONAL

«Se introdujeron rápidamente disparando y comenzaron a tirar bombas», explicó el comisario de Policía

17 sep 2014 . Actualizado a las 22:26 h.

Al menos 13 estudiantes murieron este miércoles y otros 47 resultaron heridos en un ataque armado perpetrado contra la sede de la Universidad Federal de Educación en la ciudad nigeriana de Kano, en el norte del país, una de las zonas más castigadas en los últimos meses por la milicia radical islámica Boko Haram.

«Detectamos movimientos de algunas personas en torno a la Universidad, pero se introdujeron rápidamente disparando y comenzaron a tirar bombas», explicó el comisario de Policía, Adenrele Shinaba.

Los hechos ocurrieron sobre las 14.30 hora local (13.30 GMT), cuando un grupo de hombres armados irrumpió en el centro universitario y abrió fuego contra los alumnos, que intentaron huir del edificio presa del pánico.

La Policía precisó que durante el ataque también murieron dos de los asaltantes, supuestamente miembros del grupo terrorista islámico Boko Haram.

Antes de acceder al centro, los atacantes, que iba armados con fusiles de asalto AK-47, mataron a los guardias de seguridad de la entrada principal.

Un vez dentro del edificio, arrojaron varios explosivos y empezaron a disparar indiscriminadamente contra los alumnos, según detalló la Policía.

Algunos testigos también relataron al diario local The Vanguard que muchos estudiantes y residentes huyeron de la zona tras escuchar las diferentes explosiones y los múltiples disparos.

Las autoridades nigerianas han asegurado que han reforzado las medidas de seguridad en la ciudad, donde ya patrullan soldados del Ejército por las calles.

Aunque por el momento ningún grupo ha asumido la autoría del ataque, todas las sospechas se centran en Boko Haram, que en los últimos meses ha sembrado el terror en el estado de Kano.

La comunidad educativa se ha convertido en el objetivo de los últimos ataques perpetrados en Kano, ya que con este ya son tres los ataques perpetrados contra centros educativos en los últimos tres meses.

El último de ellos ocurrió el pasado 30 de julio, cuando dos estudiantes murieron en un atentado suicida con bomba perpetrado por una mujer en el Centro Universitario de Estudios Islámicos y Legales.

Además, el pasado 23 de junio, otras ocho personas fallecieron tras la explosión de una bomba en la Escuela de Sanidad de Kano.

En ese mismo mes, también fueron atacadas en la misma ciudad una estación de autobuses, una iglesia y en las proximidades de una gasolinera, respectivamente, en unos atentados que causaron decenas de víctimas mortales.

200 niñas secuestradas

De esta forma, Kano se ha convertido en uno de los estados más castigados por la violencia de Boko Haram, junto a los de Adamawa, Yobe y Borno, este último convertido en feudo espiritual y operativo de sus fieles.

El grupo terrorista, que todavía mantiene retenidas a más de 200 niñas secuestradas hace más de cinco meses en el norte de Nigeria, ha perpetrado varios atentados contra escuelas en el norte del país.

Según cifras de Amnistía Internacional, cerca de un centenar de profesores y alumnos fueron asesinados en 2013 por la secta radical islámica en acciones contra centro educativos.

Boko Haram, que significa en lenguas locales «la educación no islámica es pecado», lucha por imponer un Estado islámico en Nigeria, país de mayoría musulmana en el norte y predominantemente cristiano en el sur.

Desde que la Policía acabó en 2009 con el entonces líder de Boko Haram, Mohamed Yusuf, los radicales mantienen una sangrienta campaña que se ha intensificado en los últimos meses.

En lo que va de año, Boko Haram ha asesinado a cerca de 3.000 personas y a unas 12.000 desde 2009, según los cálculos del Gobierno nigeriano.

Con unos 170 millones de habitantes integrados en más de 200 grupos tribales, Nigeria, el país más poblado de África, sufre múltiples tensiones por sus profundas diferencias políticas, religiosas y territoriales.