Un lobo solitario que abrazó el islam hace solo 18 meses

Rosa Paíno
Rosa Paíno REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

23 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Martin Couture-Rouleau se convirtió al islam hace tan solo dieciocho meses y comenzó a llamarse Ahmad Le Converti, Ahmad el Converso. Se dejó crecer la barba, cambió los vaqueros por la vestimenta negra de los yihadistas y comenzó a devorar páginas webs llamando a la guerra santa. El lunes fue abatido a tiros por la policía canadiense tras arrollar a los dos soldados -uno de ellos murió- en el párking de un centro comercial de su ciudad. Este converso típico y aburrido, como fue calificado, se convirtió en un lobo solitario que siguió el mensaje lanzado por el Estado Islámico de matar al infiel por cualquier medio, y en el que expresamente se citaba a canadienses: «Aplasta su cabeza con una piedra, o sacrificarlo con un cuchillo o atropellarlo con el coche».

Antes del 2013, su página de Facebook reflejaba la vida habitual de un joven de 25 años al que le gustaba irse de juerga o tomarse una caña en una piscina. Era copropietario de una empresa de limpieza industrial y vivía con su padre en un típica casa blanca de ladrillos de Saint-Jean-sur-Richelieu, a 40 kilómetros de Montreal.

Según contaron sus amigos al Toronto Star, su actitud cambio a partir del robo en su negocio hace un año. Se enfureció cuando la policía no tomó medidas contra el culpable, cayó en una depresión, comenzó a obsesionarse con el islam y tratar de convertir a sus amigos. Su familia contacto con las autoridades en busca de ayuda. No era un desconocido para las fuerzas antiterroristas. Le vigilaba desde que fue identificado como uno de los 90 jóvenes que intentaban enrolarse en el Estado Islámico. En julio, le retiraron el pasaporte en el mismo aeropuerto «cuando estaba a punto de partir» hacia Turquía -la puerta de entrada hacia Siria e Irak-, pero no pudo detenerlo. El lunes cumplió su sueño de ser un mártir.