Cuba y Noruega pelean juntas por la paz en Colombia

Europa Press

INTERNACIONAL

STRINGER | REUTERS

Los países garantes del proceso entienden que el recrudecimiento del conflicto de las últimas fechas «pone en riesgo» todo lo logrado hasta la fecha

28 may 2015 . Actualizado a las 10:03 h.

Los representantes de los países garantes del proceso de paz colombiano -Cuba y Noruega- han pedido este miércoles al Gobierno de Juan Manuel Santos y a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que avancen hacia un «alto el fuego bilateral y definitivo», tras mostrar su «preocupación» por el «escalamiento del conflicto armado» en el país.

«Hacemos un llamado a las partes a que continúen sus esfuerzos para seguir avanzando en la discusión de las cuestiones pendientes, incluyendo la adopción de un acuerdo para el cese bilateral definitivo del fuego y las hostilidades», han indicado los representantes de Cuba, Rodolfo Benítez, y de Noruega, Dag Nylander, a través de un comunicado conjunto que publica en Caracol Radio.

Los países garantes del proceso de paz entienden que el recrudecimiento del conflicto, tras los últimos ataques mutuos -en los que han muerto dos guerrilleros que formaron parte de la delegación de las FARC en La Habana- «pone en riesgo» todo lo que se ha logrado hasta el momento, entre lo que destacan el plan de desminado o el «incremento de la confianza» entre las partes.

Cuba y Noruega recuerdan en el texto que «nunca antes» los colombianos habían estado tan cerca de la paz, durante más de medio siglo de conflicto armado, e instan a «preservar» los acuerdos parciales que se han ido logrando en las negociaciones de La Habana.

Estas advertencias llegan después de que la guerrilla suspendiese el pasado viernes alto el fuego unilateral e indefinido que había comenzado el pasado 20 de diciembre, a raíz de los bombardeos llevados a cabo por el Ejército de Colombia, que han acabado con la vida de, al menos, cuarenta miembros de las FARC.

En este contexto, los países garantes del proceso han lamentado la «pérdida de vidas humanas» y han manifestado su «plena disposición» a continuar contribuyendo al avance de las conversaciones y la adopción de un acuerdo final para terminar el conflicto y la construcción de una «paz estable y duradera en Colombia».