Devaluación de la libra y mayor presión fiscal amenazan el gasto de 60.000 británicos en Galicia

Manoli Sío Dopeso
M. Sío Dopeso VIGO / LA VOZ

INTERNACIONAL

Pilar Canicoba

Uno de cada cuatro turistas que visitan España es de Reino Unido, y 300.000 tienen residencia permanente

27 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Puestos a ver el lado bueno de las cosas, tal vez el brexit consiga acabar con el turismo de borrachera y balconing que cada verano desembarca a miles de jóvenes y desenfrenados británicos en la costa mediterránea (Gandía, Salou, Magaluf, Palma). 

A pesar de los ingresos que dejan, no son esos los visitantes que España teme perder. Pero lo cierto es que la preocupación es grande, por una posible pérdida de la capacidad adquisitiva de los ciudadanos de Reino Unidos si la libra se deprecia como anticipan los analistas; y el consiguiente desvió de su gasto vacacional hacia países más baratos.

El impacto para el sector, si esto ocurre, no será pequeño, porque uno de cada cuatro turistas que visitan España es de nacionalidad británica. De hecho, el último número de Cuadernos de Información Económica, editado por Funcas -la fundación de las antiguas cajas de ahorros- un mes antes del referendo que ha dado la victoria al brexit, sostiene que el mayor el impacto de la salida de Reino Unido de la UE se producirá en el turismo. 

España recibió 15,8 millones de visitantes británicos en el 2015 (año récord de visitantes) que generan más de 12.000 millones de euros. Estas cifras hacen que Reino Unido se haya consolidad como el principal mercado emisor para España.

Esta estrecha relación de intereses entre ambos países (sol, playa y vivienda a precios competitivos a entre una y dos horas de viaje en avión, a cambio de una facturación que crece año a año) explica el despliegue logístico habilitado para favorecer la afluencia del turismo de habla inglesa.

En la actualidad hay conexiones desde 28 aeropuertos británicos a 35 españoles, incluidos los tres gallegos. Gracias a ello Reino Unido es el país de origen de un 23,6 % del total de llegadas internacionales, y genera un 20,3 % de los ingresos por turismo en España. Ambos indicadores, volumen y gasto, convierten al Reino Unido en el principal mercado para España, por delante de Alemania y Francia.

Dice Funcas que, si bien de entrada las preferencias de los turistas británicos hacia España no deberían de no variar de manera notable, el tiempo de la estancia, así como el gasto durante la misma, sí podrán verse resentidos, con caídas significativas.

A ello habría que sumar el efecto que pueda tener, según Funcas, otra de las medidas posibles que se aplicarán para sostener la economía británica sería, una subida de impuestos que mermaría el poder adquisitivo de los ciudadanos. 

El impacto en Galicia

¿Y en qué medida el brexit hará bajar la afluencia de turistas ingleses en Galicia? La Xunta recuerda que el mercado británico se sitúa en el quinto lugar en el ránking de turistas extranjeros en Galicia. En concreto, a lo largo del primer cuatrimestre de este 2016, los británicos supusieron el 7,4 % del total internacional. El turismo que procede de Reino Unido superó el año pasado el 14 % del total de viajeros alojados y el 38 % el volumen de estancias hoteleras. Dice el sector que, aunque comparten el interés con el mercado alemán, al cierre del 2015 los establecimientos hoteleros alojaron a cerca de 60.000 turistas británicos, lo que supone un nuevo incremento de casi el 20 % con respecto al mismo período del 2014. 

El impacto en el sector inmobiliario pasará de largo en Galicia, pero si hará mella en las comunidades del sur. 

15.000 viviendas al año

Hay 760.000 británicos que tienen su segunda residencia en España, y cerca de 319.000 de ellos son residentes permanentes, principalmente jubilados que viven de una pensión, cobran en libras y son usuarios intensivos de la sanidad pública, a la que tienen derecho como ciudadanos comunitarios. Su futuro dependerá de que las negociaciones con la UE, o las bilaterales que pueda emprender España, les mantengan la cobertura sanitaria.

Los británicos son los primeros compradores de vivienda de costa: 15.700 el año pasado. Según el Colegio de Registradores, encabezan el mercado de Reino Unido acaparó el 21 % de las adquisiciones de extranjeros en el 2015. El temor del sector inmobiliario es más que comprensible