El Gobierno crea dos grupos especiales para atraer grandes firmas

r. s. REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

JUSTIN TALLIS | AFP

Madrid se ofrece para captar a parte de los 30.000 altos directivos de banca que se podrían mover de la City

21 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La salida del Reino Unido de la Unión es un reto mayúsculo para la construcción del proyecto europeo, pero también una oportunidad para que algunos países puedan recibir servicios que se están ofreciendo ahora desde Londres.

El Gobierno español no oculta que quiere llevarse para Madrid algunos de los principales bancos que trabajan ahora desde la City con unas condiciones ventajosas al ser un socio de la UE. Un informe del think tank Bruegel calcula que los bancos de inversión que ahora operan desde la capital británica moverán unos 10.000 empleos al resto de países del continente. Otros 20.000, entre consultores, abogados y contables, también tendrán que mudarse. Son en total 30.000 directivos con altas remuneraciones que la Moncloa, por un lado, y la Comunidad de Madrid, por otro, tratan de no dejar escapar.

Hay ya dos comisiones de trabajo creadas en España para captar esas empresas, según explican fuentes gubernamentales. Una la encabeza la Vicepresidencia con un grupo de asesores, con un carácter más transversal; la otra la conforman el Banco de España, la Dirección General del Tesoro (Ministerio de Economía) y la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), de carácter puramente económico y que lidera esta última. La Comisión tiene un documento de trabajo llamado Welcome en el que explica que se darán facilidades para que las empresas financieras asentadas en el Reino Unido vengan a España. Esas facilidades son preautorizaciones en apenas dos semanas y aceptación de documentación en inglés, sin necesidad de traducción.

«No creo que se vaya a producir un cambio en bloque de muchas de esas empresas [de la City] hacia otra ciudad, sino una dispersión», admitía hace un par de semanas en el Congreso el ministro Luis de Guindos, uno de los más implicados en esa captación. Y citaba como otro de los atractivos que España «tiene una de las normativas menos restrictivas en el mundo para la inversión extranjera». «Es una oportunidad», remachaba.

Escaso eco en las bolsas

Por otra parte, el anuncio de la fecha para el inicio de la desconexión apenas tuvo incidencia ayer en los mercados. Se daba por descontado que sería antes de acabar el mes. Las principales bolsas europeas cerraron con ligeras pérdidas, a excepción de Londres, estable y que logró un nuevo récord gracias a una libra muy debilitada.