El dirigente opositor Alexei Navalni, que lideró la protesta, está entre los arrestados. El Kremlin tilda la protesta de «provocación»
27 mar 2017 . Actualizado a las 13:55 h.Más de 1.000 personas fueron detenidas en la manifestación anticorrupción celebrada el domingo en Moscú y liderada por el dirigente opositor Alexei Navalni, que está entre los arrestados, según ha informado este lunes una fuente policial a la agencia de noticias Sputnik. En total, fueron detenidas más de 1.000 personas», ha afirmado la fuente.
El Kremlin ha calificado la protesta de «provocación y mentira» y ha defendido la actuación de la policía rusa a la hora de dispersar a los manifestantes. «Las fuerzas del orden actuaron de manera absolutamente correcta, altamente profesional, y de acuerdo con la ley», dijo Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, a la prensa local. Además, rechazó las críticas vertidas por la Secretaría de Estado norteamericana, que criticó la detención del líder opositor Alexéi Navalni y de varios centenares de manifestantes.
El Ministerio de Interior solo ha confirmado unos 500 detenidos, si bien los medios de comunicación rusos habían elevado la cifra de arrestados a 700. Entre 7.000 y 8.000 personas tomaron el domingo la capital rusa para atender la convocatoria realizada por Navalni para protestar en Moscú y en otras 80 ciudades del país contra la corrupción en la Administración de Vladimir Putin.
Navalni fue detenido y se enfrenta a una multa de hasta 20.000 rublos (unos 300 euros) o hasta 100 horas de trabajos en beneficio de la comunidad por «organización de una presencia masiva en lugares públicos que causó violación del orden público», infracción que prevé un máximo de 15 días de arresto administrativo.
El líder opositor, que se hizo popular como autor de un blog anticorrupción en 2013 y fue el segundo candidato a alcalde más votado en las elecciones de Moscú, también fue uno de los activistas más visibles durante las protestas multitudinarias que tuvieron lugar en la capital rusa en 2011 y 2012.
En la actualidad enfrenta varios cargos por corrupción y tiene ya dos penas suspendidas: una por el caso de la maderera Kirovlés y la otra, de tres años y seis meses de prisión, impuesta a finales de 2014 por una estafa a la cadena francesa de cosméticos Yves Rocher.