La izquierda brasileña se manifiesta para exigir la salida de Temer, acorralado por la corrupción

carola solé BRASILIA / AFP

INTERNACIONAL

NELSON ALMEIDA | AFP

El principal socio del Gobierno debate si mantiene o no el apoyo al mandatario

22 may 2017 . Actualizado a las 07:35 h.

La izquierda brasileña salió ayer a la calle para exigir la salida del presidente Michel Temer y nuevas elecciones, mientras que el principal socio del Gobierno debate si mantiene o no el apoyo al mandatario, acorralado por una investigación por corrupción.

Temer lucha por sobrevivir políticamente desde que el miércoles el diario O Globo revelara una grabación en la cual presuntamente daba aval para comprar el silencio del expresidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, preso por corrupción.

Esa comprometedora conversación forma parte de declaraciones premiadas de ejecutivos del gigante mundial de la alimentación JBS, entre ellos sus dueños Joesley y Wesley Batista. Fue Joesley el que grabó secretamente a Temer durante una reunión en la residencia presidencial a altas horas de la noche.

El Supremo Tribunal Federal (STF) abrió el jueves una investigación sobre el caso y el fiscal general, Rodrigo Janot, acusa a Temer de «obstrucción a la Justicia» por impedir el avance de la operación Lava Jato en una trama con más políticos donde hubo posible corrupción y organización criminal.

Un ejecutivo de JBS acusó a Temer también de haber recibido ilegalmente 15 millones de reales en el 2014 (6,37 millones de dólares) por actuar en favor de la empresa.

Después de haber proclamado su inocencia y de haber enfatizado que no dejaría su cargo, el mandatario rompió un silencio de casi dos días y contraatacó el sábado diciendo que esa grabación fue «manipulada y adulterada». Temer, que hace un año asumió el poder en sustitución de la destituida Dilma Rousseff, pidió al STF que «suspenda la investigación, hasta que se verifique la autenticidad de la grabación clandestina».

Para evitar que prospere la campaña en su contra, Temer necesita contener la erosión de su mayoría en el Congreso, que hasta ahora le permitió contrarrestar su impopularidad récord y votar polémicas medidas de austeridad.

Ahora todas las miradas están puestas en los socialdemócratas PSDB, el principal aliado del Gobierno. El partido, que está dividido en relación con el apoyo a Temer, se recupera aún de la caída estrepitosa de su presidente, Aécio Neves, que fue suspendido como senador esta semana al verse implicado también en las grabaciones de Batista.