La maduración de las uvas se acelera respecto al pasado año

Luis Díaz
LUIS DÍAZ MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

CEDIDA

El adelanto es de unos diez días en el conjunto de la Ribeira Sacra

24 jul 2014 . Actualizado a las 07:05 h.

La próxima vendimia en la Ribeira Sacra promete ser, con permiso de los hongos y de alguna granizada inoportuna, algo menos atípica que el pasado año. Si se toma como indicador el comienzo del envero, o cambio de color de las uvas, la maduración se adelanta en los viñedos, con carácter general, unos diez días con respecto a la pasada cosecha. Desde el consejo regulador vaticinan una cosecha «algo máis normal», en la línea de los años anteriores. Todo dependerá de las condiciones meteorológicas en la recta final de la campaña, pero la recogida de la uva podría estar en marcha a partir del 20 de septiembre.

«Nas nosas viñas os racimos comenzan a pintar nove días antes que o ano pasado», señala Manuel Gómez Guntiñas, de la bodega Val de Quiroga. En puntos de la ribera de Doade, y en otros viñedos bien orientados de la ribera del Sil, el adelanto todavía es algo mayor. El cuajado del racimo también fue algo irregular en esta campaña, pero no se dio ni de lejos el retraso en el ciclo vegetativo de la cosecha anterior. Falta por calibrar, pese a todo, la incidencia de los ataques de hongos que se detectaron en las últimas semanas en las viñas sobre la producción final de uva en esta campaña.