La confederación pone límites al arreglo del muro del club fluvial

Luis Díaz
LUIS DÍAZ MONFORTE / LA VOZ

MONFORTE DE LEMOS

NATALIA SENRA

Las obras no podrán ir más allá de la reposición del tramo derrumbado

22 ago 2014 . Actualizado a las 07:01 h.

La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil autorizó por vía de urgencia las obras de reconstrucción del muro de contención que separa el cauce del río de las piscinas del Club Fluvial de Monforte. El desplome se produjo a comienzos del pasado mes de junio, en un tramo que presentaba un gran socavón como consecuencia de las crecidas invernales. Desde entonces, la zona en la que se ubican los vestuarios permanece cerrada al público por motivos de seguridad. La directiva pretendía realizar una reforma de mayor alcance, pero solo obtuvo permiso para reponer la estructura que se vino abajo.

Los directivos del Club Fluvial trataron en una reciente asamblea la comunicación que les trasladó la confederación hidrográfica. A partir de ese momento se abrió un plazo para que las empresas interesadas en realizar las obras, en los términos que establece la autorización, pudiesen presentar sus ofertas. Fueron seis los constructores que se interesaron, de los que cuatro se decidieron a entregar finalmente sus propuestas económicas.

Los sobres con las ofertas de las empresas se abrirán el próximo lunes, en una reunión de la directiva previa a la asamblea de socios convocada para el miércoles 27 de agosto. Será en esta última cuando se debata la derrama necesaria para la realización de las obras. En una primera valoración, poco después del derrumbe, se barajó un presupuesto de algo más de 100.000 euros para afrontar la reparación de los daños. Todo apunta, sin embargo, a que el coste de las obras será sensiblemente inferior por las limitaciones impuestas por la confederación hidrográfica. Aunque el Club Fluvial era partidario de una solución más ambiciosa, el permiso que recibió solo permite reponer el muro de forma que quede tal y como estaba antes del desplome.

Trámites muy lentos

«No se puede construir de nuevo todo el muro, porque los trámites para una obra de esa envergadura llevarían más de un año», explica la presidenta del Club Fluvial, Luisa Vázquez. La directiva de esta entidad planteó en su día como alternativa construir una escollera de piedra entre la presa y el muro, para atenuar el impacto de las crecidas. Otra opción que se estudió fue extender la zona de contención al ángulo más próximo a la presa, donde el agua se encajona y hace presión sobre el muro. Ninguna de estas alternativas obtuvo, por un motivo u otro, el visto bueno de los técnicos de la confederación hidrográfica.