La familia de uno de los detenidos estudia querellarse contra la mujer

Carlos Cortés
carlos cortés MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

Asegura que hay testigos que los vieron juntos con normalidad y que tras la escena grabada la denunciante se levantó y se fue de vuelta al concierto

19 sep 2014 . Actualizado a las 15:06 h.

Familiares de los dos jóvenes detenidos por su supuesta relación con el vídeo sexual grabado durante el festival de música rock celebrado el pasado día 6 en el parque de la calle Zapardiel les mostraron ayer su apoyo en el juzgado. La familia del que aparece en el vídeo practicando sexo oral a la mujer que lo denunció se muestra indignada por la acusación y estudian la posibilidad de entablar acciones legales contra ella.

En la declaración que prestó ayer en el juzgado, este hombre niega haber agredido de ninguna manera a la mujer. Admite que mantuvo relaciones sexuales con ella -su cara se ve claramente en las imágenes que circulan por WhatsApp-, pero dice que fueron consentidas. Al parecer, testigos aportados tanto por su defensa como por la Policía corroboran que los vieron juntos antes de la escena que recoge el vídeo y que ella estaba consciente. Y añaden que después de lo que se ve en las imágenes ella se levantó y volvió por su propio pie a la zona del concierto. Según esta versión, el aparente desvanecimiento que parece estar sufriendo en el vídeo, sería solo momentáneo. Él y la mujer no son amigos, ni fueron juntos al concierto. Ni siquiera se conocían antes.

En cualquier caso, la decisión de querellarse por falsa denuncia contra la supuesta víctima no está todavía tomada. Antes de hacer este movimiento, todo apunta a que esperarán a ver cómo avanza la instrucción del caso. Ellos esperen que la jueza acabe levantando la imputación con la que este joven salió ayer del juzgado y que el caso se archive, por lo menos en lo que respecta a la acusación de abuso sexual.

En este sentido, puede ser significativa la suavidad de las medidas cautelares impuestas por la jueza para los dos detenidos. Tendrán que presentarse los días 1 y 15 de cada mes en el juzgado. En los casos de abusos sexuales no es raro que las medidas cautelares incluyan órdenes de alejamiento de la presunta víctima. En este caso, no ha ocurrido así, aunque hay que tener en cuenta que la denunciante vive fuera de la comarca de Monforte, lo que reduce las posibilidades de un encuentro fortuito.

La jueza no impone más medida cautelar que hacerlos pasar por el juzgado cada quince días