La bajada del río deja a la vista el desgaste del paseo del Cabe

c. cortés MONFORTE / LA VOZ

MONFORTE DE LEMOS

CARLOS CORTÉS

Las crecidas de los últimos inviernos han socavado la escollera del malecón de Monforte, que tiene piezas desprendidas

29 sep 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

La escollera construida en el 2011 en el tramo del paseo fluvial que pasa por el barrio de Ramberde está seriamente desgastada. Antes de este verano ya se sabía que las crecidas de los dos inviernos anteriores había socavado la base de tierra del paseo, justo a continuación del refuerzo a base de grandes bloques de granito instalados hace cuatro años en la zona por la Confederación Hidrográfica Miño-Sil para corregir los destrozos provocados unos meses antes por las riadas del Cabe.

Aquellas obras modificaron la curva que hace el río al principio del paseo del Malecón. La suavizaron y reforzaron su arco exterior con gran número de bloques de piedra. Los autores del proyecto pretendían reducir la fuerza con la que entraba el río en la curva y reforzar la orilla más vulnerable con los grandes bloques de piedra.

Cinco bloques sueltos

El primer tramo de la nueva escollera parece estar aguantando. El descenso del nivel del agua, especialmente evidente desde hace unas semanas, está dejando a la vista que la salida de la curva no resiste tan bien. Con el nivel actual del río, se puede ver que al menos cinco bloques de granito están desprendidos de la base del paseo justo al final de la escollera. Además, la orilla ha perdido gran cantidad de su base de tierra en un tramo de unos quince metros de longitud, a continuación de la zona sostenida con granito.

Dos metros por segundo

Este verano no ha sido seco, así que el nivel de río y embalses se ha mantenido alto hasta prácticamente el comienzo del otoño. Hace semanas empezó a bajar, hasta el punto de que en estos momentos el Cabe lleva apenas dos metros cúbicos de agua por segundo justo antes de llegar al casco urbano. Las mediciones de la estación de seguimiento de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil en la parroquia de Ribas Altas daban ayer por la tarde un nivel del agua de 42 centímetros en ese punto, cuando el nivel de prealerta de riadas no se activa en esta estación hasta que se marca los 2,42 metros de profundidad. El embalse de Vilasouto, en el río Mao, el principal afluente del Cabe, está al 43,34% de su capacidad.