Una ruta tradicional pasa junto a la zona incendiada en junio en O Courel
29 nov 2015 . Actualizado a las 21:17 h.El llamado Camiño da Vena es una antigua ruta que sirvió para transportar el mineral de hierro extraído en las minas de A Veneira de Roques -en A Pobra do Brollón- a las ferrerías de O Courel, principalmente a la de Baldomir. También lo usaron los vecinos de A Veneira para acudir a las ferias de este último municipio. La ruta ofrece un gran interés paisajístico, ya que discurre por una de las zonas menos conocidas de los límites entre los municipios de A Pobra do Brollón, Samos, O Incio y O Courel. Se da la circunstancia de que el camino pasa por el límite del área quemada por el incendio que se produjo el pasado julio en el valle del río Lóuzara, por lo que permite apreciar el grave daño sufrido en esta zona de gran valor ambiental.
El recorrido empieza en la parte alta de la aldea de A Veneira de Roques, por una pista asfaltada que da acceso al núcleo y que sale a una pista de forestal que lleva al Alto do Castro y al lugar de O Busto. Hay que torcer a la izquierda y caminar por esta pista a lo largo de unos tres kilómetros hasta llegar a un cruce situado entre el lugar de O Graíl y el Alto do Penelo. Es preciso tomar el camino de la derecha y andar otros setecientos metros hasta llegar a una bifurcación. Tomamos la pista de la izquierda y caminamos otros trescientos metros hasta llegar a un nuevo cruce de pistas forestales, donde nos desviamos a la izquierda. La pista que sale a mano derecha lleva hasta el mirador de Catro Cabaleiros.
Metalurgia artesanal
A unos seiscientos metros de este desvío se encuentra la llamada Pena da Castra, la única ferrería eólica que se conoce en Galicia. Consiste en un gran peñasco hueco donde se aprovechaba la fuerza del viento para atizar el fuego con el que se calcinaba artesanalmente el mineral de hierro. Para llegar a ella hay que tomar un estrecho sendero que arranca a la derecha del camino y se abre paso entre el espeso monte bajo a lo largo de un centenar de metros.
Tras visitar este singular paraje, hay que volver al camino principal, que distintas y espectaculares vistas panorámicas del valle del río Lóuzara y la sierra de A Escrita, y como telón de fondo la sierra de O Courel.
En el kilómetro siete el camino pasa a la altura de los llamados Picos de Miranda, lugar donde tenemos nuevas y espectaculares vistas del entorno. Desde aquí se divisan claramente las huellas que dejó el incendio del pasado verano. Un kilómetro más adelante, sale a la izquierda de la pista principal un camino que lleva a la aldea de Eiriz. Hay que seguir de frente y sin desviarse a lo largo de unos ochocientos metros hasta llegar al lugar de Chao de Miranda, donde tenemos otro impresionante mirador natural.
Más adelante nos encontramos con un nuevo cruce de pistas. Debemos seguir de frente, sin desviarnos, y recorrer unos 1.200 metros en dirección a la aldea de Carballal, bordeando la Pena do Moucho. Desde este lugar también se puede disfrutar de unas interesantes vistas de la zona.
Más adelante la pista se bifurca de nuevo. En este caso tenemos que seguir por el camino de la izquierda, que desciende a lo largo de unos trescientos metros hasta salir a la carretera que lleva a Carballal. En este punto giramos nuevamente a la izquierda y después caminamos por el asfalto durante medio kilómetro para entrar finalmente en la localidad caurelana de Carballal.
La longitud de la ruta es de unos 10,8 kilómetros y la dificultad es media. Puede recorrerse a pie, pero también es interesante para hacerla en bicicleta de montaña o en todoterreno.
Cómo llegar
Hay que salir de la capital del municipio de A Pobra do Brollón por la carretera que lleva a Saa y A Veneira de Roques. En el kilómetro once está el acceso a la aldea, que se encuentra a doscientos metros del desvío