En As Lamas se pudren inversiones públicas por valor de 500.000 euros

Carlos Cortés
carlos cortés MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

Solo el observatorio de empleo y el campo de fútbol costaron cerca de 400.000

20 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El Ayuntamiento, la Xunta y la Unión Europea se gastaron cerca de 500.000 euros en los edificios públicos que ahora languidecen en As Lamas sin uso alguno. Esa es la cuenta de las inversiones realizadas directamente por las administraciones públicas, y no incluye las instalaciones también abandonadas construidas por las diferentes secciones de la antigua sociedad Val de Lemos. Esa cifra tampoco recoge lo invertido en aquellos servicios que sí están funcionando, como el campo de vuelo o la zona de prácticas para autoescuelas.

En las aproximadamente treinta hectáreas que forman la antigua bolsa de suelo municipal de As Lamas fueron construidas durante los últimos treinta años al menos una decena de instalaciones, unas pensadas para acoger servicios públicos y otras para la práctica de diferentes deportes y aficiones. Siete de ellas fueron construidas directamente por el Ayuntamiento, en solitario o con ayuda de otras administraciones. De esas siete, solo permanecen operativas el campo de vuelo para avionetas y ultraligeros y la pista de prácticas para autoescuelas. Las otras cinco llevan años abandonadas y deteriorándose a marchas forzadas.

El grueso de las inversiones públicas en la zona de As Lamas se llevaron a cabo entre los últimos años noventa y la primera década de este siglo. Los proyectos empezaron a gestarse en su mayor parte en el primer mandato municipal del alcalde Nazario Pin y se llevaron a cabo en el segundo.

El primero de ellos nació en 1997 e iba a costarle 120.000 euros a la Consellería de Sanidade y otros 60.000 al Ayuntamiento. Fue el denominado observatorio de empleo, un proyecto que nacía al calor de las subvenciones de un plan que la Xunta denominó Itinere y tenía como objetivo completar la formación de trabajadores y parados en busca de empleo. El edificio fue construido en 1998 y solo permaneció operativo unos pocos años. En su último uso conocido, el Ayuntamiento lo reabrió en el 2008 como sede de una escuela que duró un año, ya con Severino Rodríguez en la alcaldía.

Pero entre lo construido aquellos años en As Lamas lo más caro resultó ser el campo de fútbol. Terminado en el 2003, costó 200.000 euros. Con un terreno de juego de tierra y unos vestuarios perfectamente dotados, hasta ahora no ha servido más que para que el Club Lemos lo utilizase para entrenamientos en el 2008, durante el tiempo que duró la instalación de césped artificial en el Luis Bodegas.

El esqueleto de una fundación que no llegó muy lejos y una pista que acabó en el juzgado

Junto al edificio hoy cerrado y con la fachada llena de humedades del observatorio de empleo unas letras metálicas colocadas en una verja anuncian la «Fundación Instituto da Construcción Val de Lemos». Unos metros por detrás de la valla, el esqueleto de lo que iba a ser una nave para la realización de prácticas laborales. Solo un año después de la construcción del malogrado observatorio, el Ayuntamiento anunciaba en 1999 la cesión a la asociación provincial de empresarios de la construcción de la finca colindante para que les sirviese de sede local. Los empresarios ponían en marcha una fundación que se proponía organizar cursos de especialización para obreros de la construcción. Hace años que la fundación carece de actividad y el edificio que iba a servirle de sede se quedó en poco más que los cimientos.

En aquella época, el Ayuntamiento también habilitó un terreno en As Lamas como pista de equitación. En ese proyecto no gastó fondos propios, sino que recurrió al plan Leader, que financió las obras con 88.000 euros. Aquella inversión acabó siendo investigada por la Fiscalía, aunque el asunto fue finalmente archivado.