Un castro que vigiló una mina de oro en Barxa de Lor

carlos rueda / francisco albo MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

La Casa da Lama, a la derecha, está construida sobre el mismo promontorio en el que se encuentra un castro minero
La Casa da Lama, a la derecha, está construida sobre el mismo promontorio en el que se encuentra un castro minero CARLOS RUEDA

Una parroquia de A Pobra do Brollón conserva vestigios de un complejo minero de la época romana

15 jun 2017 . Actualizado a las 13:12 h.

Cerca de Barxa de Lor, en el municipio de A Pobra do Brollón, se encuentra el antiguo complejo minero de A Lama, formado por el castro del mismo nombre y la mina de O Medo. Constituye una notable muestra de la minería romana en el sur lucense y de la técnica conocida como ruina montium, que utilizaba la fuerza hidráulica para socavar los aluviones auríferos. En este caso, las aguas de los arroyos de Barxa y O Val fueron desviadas a través de una red de canales hasta los depósitos de explotación, para finalmente ser conducidas hasta las galerías y pozos.

De los canales no quedan restos, aunque hay indicios de que uno de ellos pudo ser un camino que empata con una carretera en la parte alta de la explotación. Este camino lleva al lugar de Liñar, en el monte de A Veliña, donde hay un manantial cuyas aguas también pudieron aprovecharse para la explotación minera. En este punto se distinguen dos profundos cortes en el terreno y cabe la posibilidad de que también se realizaran labores mineras para la extracción del oro.

Este antiguo enclave minero puede visitarse en un recorrido que comienza en el lugar de A Ponte, junto al puente de Barxa de Lor, una importante obra de posible origen romano que experimentó importantes reformas a mediados del siglo XVI. Por este puente discurría una vía romana secundaria que unía Valdeorras con Belesar y que hoy forma parte del Camino de Invierno. A la salida del barrio de A Ponte se halla la iglesia parroquial de Santa Mariña de Barxa de Lor, del siglo XVIII.

Aldea de A Lama

Unos metros más adelante hay una bifurcación en la que debemos tomar el ramal de la izquierda para llegar la aldea de A Lama, situada en el kilómetro 0,550 de la ruta. Aquí ya se aprecian varios cortes en el terreno, producto de antiguas labores mineras. Por debajo del camino quedan los restos de una antigua vivienda, más tarde aprovechada como cuadra, tras la cual se abre una antigua galería de unos cien metros de longitud y con varios ramales. Su propietario, un vecino de A Ponte conocido por Xenén y ya fallecido, guardaba el ganado en la mina. Luego tuvo que tapiarla por precaución, ya que durante el invierno las galerías se inundaban. Unos años más tarde, la vivienda quedó abandonada y la cubierta se desplomó, tapando el acceso al interior de la mina.

Corte en el terreno

Unos cien metros más adelante, en el lugar de O Medo, se aprecia un gran corte en el terreno. en forma de cuña, formado por dos grandes huecos. Se supone que en sus respectivas cabeceras hubo un depósito de agua que era encauzada hacia las galerías y pozos de la mina. Bordeamos por la izquierda la explotación y seguimos hasta el kilómetro 0,950, en parte alta de la mina, de donde sale a la derecha un camino que lleva al lugar de O Liñar, a unos setecientos metros. Seguimos caminando por el asfalto a lo largo de medio kilómetro hasta llegar a una curva de la que sale a mano izquierda un camino que lleva al castro de A Lama, situado a unos doscientos metros. Sobre el mismo promotorio en el que fue construido el castro está la Casa da Lama, que destaca por tener unas notables dimensiones y por poseer una capilla interior. En ella hay un retablo con una inscripción que dice que fue construida en 1779 a cuenta de Domingo Pedro Ribadeneira.

El castro de A Lama, como otros de la vecina comarca de Quiroga, estuvo directamente relacionado con las explotaciones mineras romanas. Gracias a su estratégica posición permitía controlar el paso a través del valle del Lor y los accesos a las minas de oro de A Lama, A Trampilla y O Xanelo. Estas dos últimas se hallan en la orilla opuesta del río, en la parroquia quiroguesa de Quintá de Lor. En el asentamiento, que conserva restos de muros defensivos, nunca se realizaron excavaciones arqueológicos. Hay que señalar que se encuentra en terrenos privados de acceso restringido.

Cómo llegar

Hay que salir de Monforte por la carretera LU-933 en dirección a Quiroga. En el kilómetro 16,7 y a la altura del viaducto de A Labrada, es preciso desviarse a la izquierda hacia el lugar de A Ponte, situado a unos cuatrocientos metros del cruce.