Iberdrola puede bajar el nivel del Sil hasta 50 metros sin siquiera avisar

Carlos Cortés
carlos cortés MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

ROI FERNANDEZ

La empresa avisó primero en enero y después en mayo de lo que va a ocurrir

20 jun 2017 . Actualizado a las 11:16 h.

El descenso del nivel del agua que se producirá este verano en el cañón del Sil es una operación rutinaria que se repite cada cierto tiempo, avalada por razones técnicas y perfectamente legal. Así lo resume Iberdrola, la empresa que tiene la concesión de la central hidroeléctrica de Santo Estevo y de todas las demás de este tramo del río Sil. Tan de rutina es que en la empresa aseguran que ni siquiera tenían obligación legal alguna de avisar a los ayuntamientos y las Diputaciones, como han hecho. Solo estarían obligados si el descenso de la cota del agua alcanzase los cincuenta metros.

Portavoces de Iberdrola confirmaron ayer que la bajada prevista para este verano es de quince metros. No necesitan más porque de lo que se trata es de dejar al descubierto las compuertas de la presa de Santo Estevo, que se encuentran a esa profundidad. La presa empezará a soltar agua en agosto y los trabajos de mantenimiento pueden prolongarse alrededor de dos meses. El proceso llegará por lo tanto en plena temporada turística, con los barcos de las rutas fluviales a pleno rendimiento. Iberdrola avisó en enero a las dos diputaciones de que este verano tendría que desaguar Santo Estevo para llevar a cabo trabajos técnicos en la presa. Portavoces de la empresa afirman que en mayo repitieron el aviso, esta vez por escrito y mediante cartas.

Una pérdida de catorce metros de cota no debería dejar fuera de servicio los embarcaderos más utilizados por los turistas, los de Doade y Santo Estevo, en la orilla lucense y ourensana, respectivamente. Sí afectará a otros como el de Os Chancís, en el municipio de Sober, más vulnerables a las oscilaciones de nivel.

La empresa cree que Santo Estevo acabará el verano con más agua que la mayoría

La información que Iberdrola está trasladando a las instituciones implicadas en el aprovechamiento turístico del cañón del Sil incluye el compromiso de que el embalse de Santo Estevo no bajará este verano de la cota del 60% de llenado. En la empresa sostienen que en vista de la situación actual de la cuenca del Sil, lo más probable es que Santo Estevo termine el verano con un índice de llenado superior a la media de los embalses de Galicia.

En estos momentos, por ejemplo, esta presa acumula un total de 168 hectómetros de agua, lo que supone que está a cerca del 80% de su capacidad total, mientras que la media gallega es veinte puntos inferior. Incluso con la bajada inducida que pretende aplicar la empresa que gestiona la central, sus cálculos auguran que el volumen de agua se mantendrá por encima de una media que al final del verano será especialmente baja, a tono con este año tan seco.

En la empresa aseguran ser conscientes de que este tramo del río Sil tiene otros usos además del hidroeléctrico, pero afirman que no pueden elegir otra época del año para llevar a cabo estos trabajos de mantenimiento. «Con las obras en marcha -explican los portavoces de Iberdrola-, no nos podemos arriesgar a sufrir subidas repentinas de nivel, que en verano son mucho menos probables».

Es cierto que las bajadas de nivel del embalse de Santo Estevo se producen de forma periódica, pero las hay especialmente dañinas para el sector turístico. Fue el caso de la que en el 2010 rebajó treinta metros el nivel del embalse entre los meses de abril y octubre. En el 2015 también hubo descenso, pero de quince metros, similar al previsto para este verano.