De 80 a 200 euros, nuevas multas en Monforte por las cámaras de la zona peatonal

Luis Díaz
luis díaz MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

Las sanciones por las cámaras de tráfico de Monforte aconsejaron revisar la ordenanza
Las sanciones por las cámaras de tráfico de Monforte aconsejaron revisar la ordenanza CARLOS CORTÉS

Los residentes que descarguen compras de sus vehículos serán sancionados si se pasan de los 20 minutos autorizados

25 dic 2023 . Actualizado a las 17:41 h.

La modificación de la ordenanza de tráfico de Monforte en las condiciones de acceso a las calles peatonales incluye un cuadro actualizado de sanciones. El texto revisado que validará este martes la corporación municipal sitúa en 200 euros la cuantía máxima de las multas en la zona del casco histórico cerrada a la circulación. Este importe se mantiene en tres de las cuatro infracciones que detectó con más frecuencia el nuevo sistema de videovigilancia. La normativa incorpora, por otro lado, un cuarto supuesto para los residentes, propietarios o arrendatarios de inmuebles que superen el tiempo de 20 minutos del que dispondrán desde ahora para el transporte domiciliario de compras particulares. El importe de la sanción será en este último caso de 80 euros.

En los cuatro apartados se aplicará una rebaja del 50% en el importe a los infractores que abonen voluntariamente la multa «ben no acto da entrega da denuncia ou dentro do prazo de vinte días naturais a contar dende o día seguinte ao da notificación da denuncia». Si cumplen cualquiera de estas dos condiciones, los conductores «cazados» por las cámaras de vigilancia de la zona peatonal pasarán a pagar 100 o 40 euros, según el artículo de la ordenanza de tráfico que hayan infringido.

Las cámaras de vigilancia llevaban varios meses instaladas antes de que se activasen con fines sancionadores el pasado 1 de octubre. Su entrada en funcionamiento no debería haber pillado a nadie desprevenido, pero los datos de actividad en esas primeras semanas pueden catalogarse como sorprendentes. Según las cifras oficiales, solo en los primeros 57 días de actividad de este sistema se tramitaron 2.458 multas. Teniendo en cuenta que la anterior ordenanza establecía una única sanción de 200 euros, solo el pago en voluntario de esas primeras denuncias equivale a 245.800 euros y supone una media diaria de algo más de 4.000 euros en concepto de multas.

La ordenanza ahora en proceso de revisión establecía sanciones de 200 euros por circular por la zona peatonal con un tipo de vehículo que por sus características no podría hacerlo. Esa misma cantidad se aplicaba por la entrada de vehículos autorizados pero carentes de permiso, o por acceder a las calles cortadas al tráfico con autorización pero fuera del horario establecido para ello. Estos supuestos se mantienen en el nuevo texto, que incorpora sanciones de 80 euros por exceder los 20 minutos fijados para la descarga de compras en los inmuebles ubicados en las calles peatonales.

Sin necesidad de autorización

Una de las novedades del reglamento que se validará en el último pleno del año —y que entrará en vigor de forma definitiva a finales de enero— es que permite acceder a la zona peatonal hasta dos veces al día, por un plazo máximo de veinte minutos y en el horario fijado tanto de mañana como de tarde, para proceder a la descarga de compras particulares. En cuanto a la necesidad de pedir autorizaciones previas al Ayuntamiento, a partir de la entrada en vigor de la nueva ordenanza habrá vehículos que queden exentos de solicitarlas cada vez que accedan a alguna calle cortada al tráfico.

Los servicios de emergencias y de traslado de personas enfermas o con movilidad reducida, las entradas o salidas de vados autorizados y los taxis para recogida y bajada de clientes, así como los transportes para entidades o actividades públicas, figuran en este último apartado. Los titulares deberán comunicar a la Policía Local las matrículas de los vehículos con los que van a prestar esos servicios para no estar sujetos a la concesión de  autorizaciones puntuales.

La revisión de la ordenanza de tráfico se basa en un informe de la Policía Local que define como «moi restritivas» las condiciones que fijaba hasta ahora excepcionalmente para el acceso de vehículos a las calles peatonales. Entre otros cambios, se establece un canal de comunicación permanente para notificar entradas por motivos de urgencia y evitar así posibles sanciones al ser detectadas por las cámaras. No se modifica, sin embargo, la prohibición de conceder nuevos vados en la zona cerrada al tráfico que se aplica desde el 2016.

La flexibilización de las normas que se venían aplicando hasta ahora afecta al abastecimiento de combustibles en establecimientos o edificios situados en el ámbito de la zona peatonal, aunque de este capítulo quedan excluidos los aprovisionamientos de leña en tractores con remolque o carrocetas. El motivo es que este tipo de vehículos se consideran «poco compatibles» con la circulación por las calles del casco histórico.