Un par de ofidios tomaron tranquilamente el sol en el parque de la Alameda de Chantada sin inquietarse ante la presencia de los paseantes
30 sep 2016 . Actualizado a las 22:05 h.Dos ejemplares de culebra viperina o de agua (Natrix maura) disfrutaron del tiempo cálido del veranillo de San Miguel en el malecón del jardín de la Alameda de Chantada. A última hora de la tarde del miércoles, los ofidios descansaban sobre el muro que bordea el cauce del Asma sin inquietarse ante la presencia de los paseantes que recorrían la zona a esas horas. Las culebras no reaccionaron ni siquiera cuando algún visitante las tocó inadvertidamente y parecían estar adormecidas, debido quizá al hecho de haber pasado un buen rato tomando sol. Los reptiles de esta especie pueden llegar a medir medio metro o incluso hasta unos ochenta centímetros de longitud, pero son inofensivos para los humanos aunque a veces su aspecto puede impresionar.