Estos están impulsados por Medio Rural como aldeas modelo o polígonos agroforestales. El último es el polígono agroforestal que están estudiando la Consellería y el concello de O Saviñao en la parroquia de Broza con cerca de 96 hectáreas
19 may 2023 . Actualizado a las 17:51 h.La Consellería de Medio Rural tiene en marcha en estos momentos 11 proyectos de recuperación de tierras agrarias en desuso en el sur de la provincia de Lugo, una zona tradicionalmente agraria y ganadera en la que estos sectores han perdido mucho peso en las últimas décadas. El último de estos proyectos en hacerse público es el de A Broza, una parroquia del municipio de O Saviñao a la que este jueves fue el conselleiro de Medio Rural para conocer el terreno de primera mano. Este de O Saviñao es uno de los tres proyectos de polígonos agroforestales que quiere desarrollar la consellería en el sur de Lugo. En esta zona están también en proceso cuatro planes de aldeas modelo y dos más de aprovechamiento de suelo de concentración parcelaria en desuso.
Tanto los polígonos agroforestales como las aldeas modelo y las masas de concentración o reestructuración parcelaria con abandono son figuras contempladas en la ley de recuperación de la tierra agraria de Galicia que fue aprobada en el 2021.
El proyecto de polígono agroforestal de O Saviñao fue anunciado el pasado mes de diciembre por la consellería y el Ayuntamiento, que en aquel momento estudiaban la posibilidad de alcanzar acuerdos con propietarios de terrenos agrarios sin uso o infrautilizados en la parroquia de A Broza que sumaban unas 80 hectáreas. En los últimos meses, los planes se han ido afinando y ahora en la consellería hablan de casi 96 hectáreas.
El objetivo de este polígono es proporcionar a los ganaderos de O Saviñao terrenos útiles para sembrar forraje o como pastizales, para ayudarles a cubrir la necesidad de más superficie de cultivo para alimentar a sus animales.
Consellería y Ayuntamiento tienen que tratar ahora de conseguir acuerdos con al menos el 70% de los propietarios de estas 96 hectáreas. Están divididas en 143 parcelas que son propiedad de 33 personas.
O Saviñao es el municipio de la comarca de Lemos en el que la ganadería conserva más peso específico dentro de la economía local. En O Saviñao sobreviven un buen número de explotaciones que en los últimos años han sabido crecer para adaptarse a las exigencias del mercado.
Pastos y forraje para las explotaciones ganaderas
Esta es la lista por municipios de los proyectos de recuperación de tierras en el sur de Lugo.
Bóveda. Polígono agroforestal de Ver. Para pastos y cultivos forrajeros o herbáceos, y formado por 51,95 hectáreas en 292 parcelas de 200 propietarios.
O Incio. Aldea modelo y polígonos agroforestales de Trascastro. Alrededor de la aldea modelo de Trascastro, orientada a la ganadería extensiva, se formaron dos polígonos agroforestales.
O Saviñao. Polígono agroforestal de A Broza. En una fase aún muy inicial, está formado por 96 hectáreas, 143 parcelas y 33 dueños.
Monforte. Reestructuraciones de Piñeira y Val de Lemos. La primera con 644 hectáreas y la segunda con 592, con concentración parcela hecha.
Sober. Aldea modelo de Francos de Proendos. Centrada en la ganadería extensiva, huerta y frutales. Con 12,87 hectáreas repartidas en 119 parcelas de 70 propietarios.
A Pobra do Brollón. Aldea modelo de Parada dos Montes. Para ganado vacuno en extensivo, con 15,55 hectáreas, 278 parcelas y 73 propietarios.
Quiroga. Aldea modelo de Bustelo de Fisteus. Con 269 parcelas de 38 propietarios.
Folgoso do Courel. Aldea modelo de Moreda. Con 39 hectáreas, 73 parcelas y 44 propietarios.
Proyectos que necesitan el acuerdo de al menos el 70% de los propietarios
Los polígonos agroforestales son herramientas administrativas contemplados en Lei de Recuperación da Terra Agraria aprobada hace dos años y tienen como objetivo servir para la recuperación de terreno agrario abandonado, infrautilizado o con unos usos claramente mejorables. La superficie de estos polígonos tiene que ser empleada para actividades relacionadas con el campo, bien sean agrícolas o ganaderas. Sobre el papel, pueden ser de iniciativa pública o privada, aunque en la práctica los que están en desarrollo en la comarca de Lemos nacieron impulsados por la Xunta y los ayuntamientos. En todo caso, sean públicos o privados, para que el proyecto salga adelante es preciso contar con el acuerdo de los propietarios de al menos el 70% de superficie delimitada para el polígono. Otro requisito indispensable es que como mínimo el 50% del terreno total esté abandonado o infrautilizado. Estos proyectos pueden incluir la reestructuración de las propiedades a través de agrupaciones parcelarias, para garantizar que el polígono disponga de una superficie mínima rentable. Los dueños de las tierras pueden elegir entre mantener o poner en producción sus parcelas con arreglo a la orientación general del proyecto, alquilarlas a los adjudicatarios que quieran utilizarlas o directamente vendérsela.