Una testigo aseguró que vio una agresión y que la afectada le contó una agresión sexual
25 abr 2014 . Actualizado a las 07:08 h.La exmujer del dueño del Queens, José Manuel García Adán no se inventó la presunta situación de maltrato que padeció, según explicaron ayer dos prestigiosos forenses que declararon en la última sesión del juicio al que está considerado como uno de los cabecillas de la operación Carioca. Ramón Arce, catedrático de Psicología Forense y director de la Unidad de Psicología Forense de la USC, que fue quien intervino como portavoz, aclaró además que la víctima presentaba un daño psicológico grave y existe una relación causa-efecto entre las secuelas y los hechos juzgados.
El experto también dijo que el miedo de la víctima a denunciar lo que supuestamente le pasaba es una situación propia entre las mujeres víctimas de maltrato. «Entra dentro de la normalidad. Hay quien incluso no denuncia nunca», explicó Arce.
«¿Pudo ser el maltrato el detonante del consumo abusivo de alcohol por parte de la víctima?», le preguntaron. «Pudo serlo, pero no podemos decirlo realmente o no podemos establecer la causa; pero esos problemas no interfieren en la realidad de su testimonio», expresó el profesor Arce. Este experto también indicó en otro momento que era muy probable que las versiones de la afectada fueran ciertas.
El informe a estos dos expertos le fue pedido por el anterior abogado defensor de García Adán. Su actual letrado, que definió el documento como la «tabla de salvación» para las defensas trató de desvirtuarlo en sus conclusiones finales. La petición de la revisión de la víctima fue recurrida en su día por la víctima.
Otro testimonio que puede ser clave para las acusaciones es el de la limpiadora de la casa del la pareja. Dijo que vio a la mujer golpeada y sangrando por la nariz y que en una ocasión Adán, con un arma en la mano, le dio 10 euros para que se fuera de casa porque tenía que hablar con su mujer. La testigo explicó que solo vio una agresión y recordó que ella le habló de una agresión sexual a la fuerza.