Las viejas canciones vuelven a sonar en la montaña de O Courel

Luis Díaz
luis díaz MONFORTE / LA VOZ

LUGO

Cantores y músicos populares venidos de toda la sierra protagonizaron el FIlandón

08 ago 2016 . Actualizado a las 22:22 h.

Un angosto y cristalino río subterráneo fluye en la penumbra entre caprichosas figuras blanquecinas de estalactitas. Esa imagen del interior de una cueva de la zona ilustra las primeras páginas del segundo volumen del libro Músicas do Courel. La fotografía pertenece a una esas grutas hasta hace poco desconocidas en las que los expertos rastrean ahora datos climáticos de hace medio millón de años. Al igual que esas cavidades, los cantares da serra comienzan a ser descubiertos. Y su eco se escucha incluso lejos de Galicia.

Llega por ejemplo a la cantante y musicóloga libanesa Abeer Nehme, que iba a ser la artista invitada de la edición de ayer del Filandón de Músicas do Courel. No pudo estar presente, sin embargo, debido a una indisposición de última hora, según explicó Xosé Lois Foxo, artífice del festival y autor de la trilogía de libros que recopilan la tradición musical que ha desfilado por sus diecinueve ediciones.

Devolver la visita

Profesora de universidad en Beirut y una de las voces femeninas más populares del mundo árabe, Abeer Nehme descubrió los cantares da serra después de que uno de los libros de Músicas do Courel llegase a sus manos. Fue un hallazgo que la llevó a desplazarse a Ourense en el 2012, para entrevistar para un programa de la televisión libanesa al director de la Real Banda de Gaitas de la Diputación ourensana. Foxo se había comprometido a devolver la visita a finales de este mes y actuar en el Baalbeck Folk Festival.

Pese al cambio de guion, la tradicional llamada de los cuernos celtas reunió ayer en un prado próximo a la Ferrería de Seoane, escenario habitual del festival, a veteranos músicos y cantores de la sierra de O Courel, y un buen número de curiosos ávidos de escuchar sus actuaciones pese al sol abrasador.

En todas sus ediciones, el Filandón de O Courel dedica un recuerdo a algún antiguo músico de la sierra. Este homenaje póstumo fue ayer para José López Álvarez, de la aldea de A Seara intérprete de algunas de estas melodías cuya historia se pierde en la noche de los tiempos. Piezas que según Foxo tienen valor de sobre para entrar en un museo, pero que por un día resuenan todavía vivas al pie de la Ferrería de Seoane. A orillas del bravo Lor y a tiro de piedra de la Devesa de Rogueira. Más no se puede pedir, aunque muchos suspirasen por una sombra.