Los aparcamientos disuasorios, bloqueados por falta de presupuesto

Xosé Carreira LUGO / LA VOZ

LUGO

ALBERTO LÓPEZ

Están hechos los proyectos, pero no acabó el trámite de la modificación de créditos

23 jul 2017 . Actualizado a las 23:30 h.

El jueves 23 de julio de 2015, la alcaldesa Lara Méndez comunicaba una de las decisiones más destacadas de lo que lleva de mandato: adiós a la ORA. Con el anuncio mataba dos pájaros de un tiro. Por un lado actuaba en base a lo que planteaba la justicia y por otro, colmaba las aspiraciones de muchos ciudadanos que estaban cansados de que en los últimos tiempos llegaran a los parabrisas de sus coches «recetas» de los controladores incluso por pasar cinco minutos el tiempo establecido de aparcamiento.

Los lucenses llevan dos años sin pagar por aparcar en las calles, pero cada vez es más difícil encontrar un hueco. La oposición carga contra el equipo de gobierno porque, dice, no cumplió sus planes de crear aparcamientos alternativos. Los socialistas advierten que esos espacios para dejar el coche en lugares próximos al centro no llegan porque el Ayuntamiento está operando sin el presupuesto de este año aún sin aprobar y al funcionar con él prorrogado, las inversiones están limitadas. «No hay aparcamientos disuasorios por falta de la aprobación del presupuesto; ni más, ni menos», dijo ayer una fuente socialista.

Lara Méndez, la alcaldesa, tiene en su despacho los proyectos de buena parte de los siete aparcamientos disuasorios. Anunció en marzo su puesta en marcha contando que pronto podría tener el presupuesto de este año aprobado, pero eso no sucedió. Entonces, para poder ejecutar algunas de las ideas como, por ejemplo, la peatonalización de Quiroga Ballesteros, la cubierta de la misma y también alguno de los siete aparcamientos, tuvo que recurrir a la fórmula de la modificación de créditos. Una vez superados todos los trámites que lleva este procedimiento, el equipo gobernante, estaría en condiciones de comenzar a habilitar alguno de los espacios que contempla para aparcar gratis fuera del centro.

Rubén Arroxo, el portavoz del grupo municipal del BNG, que va todos los días al consistorio en bici, asegura estar alarmado por la falta de interés del gobierno municipal por los asuntos de movilidad en la ciudad. «Leva seis meses sen facer absolutamente nada para crear unha soa praza de aparcamento. E hai que ter en conta que nalgúns casos non se trata de obras de alto custe. Abondaría con achaiar o terreo, recubrilo con area ou outro material nos sitios que fose preciso e pintar os lugares de estacionamento con cal ou algún produto similar. Con pouco investimento prestaríase un bo servizo», expresó el edil nacionalista.

En el PP lamentan que la decisión de sacar la ORA y la posterior falta de espacio para aparcar no estuviese acompañada de otras medidas como, por ejemplo, la implantación de un sistema de vigilancia con un vehículo que controlase a los vehículos que estuviesen aparcados más tiempo del que se fijase como gratuito.

SE NECESITAN CASI 2000 PLAZAS

En Lugo cuesta aparcar. A veces hay que pasar más de diez minutos buscando. «Es verdad que resulta difícil conseguir sitio en el centro pero, ojo, que nadie se equivoque, en otras ciudades gallegas aún es mucho peor. A los del BNG se les va los ojos constantemente al modelo de Pontevedra y aparcar en esa ciudad es un auténtico calvario en algunos momentos. Ni con aparcamientos disuasorios, ni nada», dijo un a fuente de los socialistas.

La falta de sitios para aparcar, que aumentará si se cierra algún aparcamiento del centro, es evidente. Fuentes de la Federación de Asociaciones de Vecinos calculan que para mejorar la situación se necesitaría habilitar por encima de las 1.600 plazas. Seiscientas vehículos es la capacidad calculada para los siete aparcamientos disuasorios.

Los colectivos vecinales plantean que haya negociaciones con ADIF para abrir al público unos terrenos que permitirían el estacionamiento de más de doscientos coches.