La falta de señalización y cuidados mancha las huellas romanas

Marta de Dios Crespo
MARTA DE DIOS LUGO / LA VOZ

LUGO

Algunos lugares han perdido las placas y los mapas no señalan bien los puntos de interés, dificultando la labor de los turistas

01 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Vender el pasado romano se complica en Lugo. A pesar de que la ciudad cuenta con un buen número de puntos de interés en su casco histórico, encontrarlos se ha convertido en algo parecido a una yincana. En O Vello Cárcere ofrecen un folleto de la ruta romana Lucus Augusti y en su mapa marcan una veintena de puntos. Algunos de los que figuran están situados en casas particulares y no se pueden visitar sin concertar una cita, otros directamente no aparecen. Es el caso del fragmento de muro ubicado en la plaza de Santo Domingo, bajo el mercado de Abastos.

La oficina de turismo municipal ofrece un folleto más actualizado sobre las ventanas arqueológicas. Nueve en total que pueden disfrutarse en las inmediaciones de la Muralla. Las interiores dependen de la limitación horaria del edificio, pero son sin duda las mejor conservadas y están debidamente señalizadas, como la que se encuentra en la oficina de turismo de la Xunta o los mosaicos que se pueden ver a través de los comercios de Doutor Castro. En esa calle, las ventanas situadas en la acera no ofrecen ningún tipo de visión por el plomado del cristal. Pasa lo mismo en la ubicada junto a Porta Nova.

Caso grave es el de los restos ubicados en Bispo Aguirre. Se ha caído o retirado la placa identificativa que anunciaba los restos romanos situados en la trasera del Círculo de las Artes. La maleza crece a sus anchas, el cristal está sucio y las inmediaciones muy descuidadas. Si el turista llegase a encontrar ese punto, por pura casualidad, se llevaría una buena decepción por su estado de conservación.