Los desahucios en Lugo, en descenso: casi 800 desde el 2013, pero 42 el año pasado

Los datos publicados recientemente por el Consejo General del Poder Judicial, referentes al período de crisis derivado de la gestión de la pandemia del coronavirus, revelan varias dinámicas que se frenaron con respecto a su ritmo anterior a la llegada del virus. Unos de los procesos judiciales que más afectados se vieron fueron los legalmente denominados como «lanzamientos». En el lenguaje popular, la ciudadanía los conoce como desahucios.

Su descenso en el año 2020 fue exponencial, y no solo en el caso del Concello de Lugo. Los datos aportados por el CGPJ se remontan hasta el año 2013, el curso más trágico en cuanto a este tipo de sentencias judiciales. 149 familias perdieron su vivienda aquel año en la ciudad amurallada, el máximo registrado. También se marcó un récord en localidades como Viveiro, una de las más populares de A Mariña para residir, donde se ejecutaron 55 lanzamientos.

A partir de entonces, estas sentencias comenzaron a descender: 136 en el 2014, 129 en el 2015... Hasta llegar a los 109 del año 2019. Fue el último año en el que los datos fueron realmente indicativos de la tendencia, ya que en el 2020 llegó el covid-19 y se produjo un descenso extraordinario, muy por encima de lo previsto. Entonces, la judicatura registró 42 sentencias ejecutorias en la ciudad de Lugo, la más golpeada por los desahucios desde hace más de un lustro en toda la provincia.

El CGPJ divide los registros por partido judicial, siendo Mondoñedo, Chantada, Vilalba, Monforte, Viveiro, Sarria, A Fonsagrada y Becerreá las que acompañan a la capital provincial en los datos. En varias de ellas no se detectaron sentencias ejecutorias de este tipo en alguno de los años, como en Becerreá en el 2013 o en A Fonsagrada el pasado 2020.

En total, la provincia de Lugo registró 766 lanzamientos desde que se tienen datos, a pesar del gran descenso de casos del año pasado, motivado, entre otras, por las medidas impulsadas por el Gobierno de España para paralizar los desahucios de las familias más afectadas por la crisis del coronavirus.

Dos tipos de desahucio

El caso más típico de desahucio es el ejecutado por el impago de un alquiler. De esto se encarga la Ley de Arrendamientos Urbanos, que aúna casi el 70 % de los lanzamientos ejecutados en la provincia desde el año 2013.

El otro ejemplo es el de las ejecuciones hipotecarias, que se da cuando los residentes en una vivienda no pueden completar el pago de la hipoteca que firmaron con el ente que les cedió el inmueble.

El perfil de la familia desahuciada, sin embargo, es el mismo en estos dos tipos. Según Mina Galván, responsable de Stop Desahucios en Lugo, el perfil típico de las personas que acuden a solicitar ayuda a sus oficinas, es el de «persoas maiores, que teñen unha pensión mínima que non lles chega para pagar o aluguer e comer; e familias nas que os pais perderon o emprego e non conseguen incorporarse de novo ao mercado laboral, ou xente con alugueres a prezos esaxerados».

Viviendas vacías

En Lugo, según datos del Instituto Nacional de Estadística, hay 12.370 viviendas vacías. Si se comparan con el total de inmuebles de uso residencial de la ciudad, 59.647, el porcentaje resultante arroja un dato que roza el récord: una de cada cinco casas de Lugo está vacía. Estas viviendas deshabitadas, concretamente el 20,7 %, significan el segundo dato más alto de las siete ciudades gallegas, ligeramente por detrás del 21,6 % de Ourense. Ambas se encuentran lejos ya del 19,7 % de Ferrol, y más todavía del 14,2 % de A Coruña y el 12,9 % de Vigo, la ciudad gallega con menos pisos vacíos.

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