Las psicólogas de Lugo avisan: «Hay niñas de ocho años con trastornos alimentarios»

María Quelle / M. G. LUGO/ LA VOZ

LUGO

De izquierda a derecha, Yésica Seijo, Lucía Fernández, Belén Vázquez y María Novo, psicólogas de la Clínica Polusa Santo Domingo
De izquierda a derecha, Yésica Seijo, Lucía Fernández, Belén Vázquez y María Novo, psicólogas de la Clínica Polusa Santo Domingo CEDIDA

Las especialistas de Lugo advierten del empeoramiento de los TCA en verano y también de que cada vez aparecen en edades más tempranas

01 ago 2023 . Actualizado a las 11:18 h.

En los últimos años se ha producido un aumento en el número de personas que sufren trastornos de la conducta alimentaria (TCA). Los TCA representan la tercera causa de enfermedad crónica en niños y adolescentes, después del asma y la obesidad, según datos de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG).

Las redes sociales, con sus cuerpos editados y sus dietas milagrosas, empeoran una situación cada vez más común en España. El hecho de que niños en edad temprana ya puedan tener acceso a Internet provoca que la edad de las personas que sufren este tipo de enfermedades disminuya de manera muy notable. «En la mayoría de los casos, los TCA empiezan en la adolescencia, pero en los últimos años se reporta un descenso en la edad de inicio, llegando hasta los 8 años», comentan las psicólogas María Novo, Lucía Fernández, Yésica Seijo y Belén Vázquez, de la Clínica Polusa Santo Domingo en Lugo. 

La pandemia que sacudió al mundo en el 2020 dejó un gran numero de efectos secundarios. Entre ellos el que más destaca es el deterioro de la salud mental de niños y adolescentes. Aproximadamente, medio millón de personas en España padecen un Trastorno de la Conducta Alimentaria. 

Con la llegada del verano, este tipo de trastornos se agravan debido a que «en esta época existe una mayor exposición a imágenes y mensajes relacionados con el aspecto físico», alertan las lucenses. Además, es un período donde aumenta la presión, «ya sea interna o externa», por cumplir con cánones de belleza impuestos por la sociedad actual, afirman las psicólogas.

¿Qué es un TCA?

Los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) son un conjunto de alteraciones relacionadas con la ingesta de alimentos, la actitud y emociones respeto a la comida y al aspecto físico. Estas alteraciones afectan tanto a nivel mental como físico a aquellos que padecen uno de ellos. Los TCA más comunes son la anorexia nerviosa, bulimia nerviosa y el trastorno por atracón, explican las especialistas de la Clínica Polusa.

El origen de los TCA es «multicasual», es decir, no provienen de algo único o determinado, aseguran las profesionales. Son un conjunto de circunstancias las que provocan su aparición. Pueden surgir de factores físicos, psicológicos, culturales y sociales.

Etapas más vulnerable para la aparición de un TCA

Diversos estudios reflejan que este tipo de trastornos tienen inicio, principalmente, en la adolescencia. Las especialistas alertan: «Se estima que, en la mayoría de los casos, el trastorno debuta entre los 12-14 y los 20 años. A pesar de este dato, pueden comenzar antes o después de ese margen temporal». En los últimos años, la edad de inicio ha bajado hasta los 8 años, lo que determinados estudios aseguran que seguirá bajando si no «se hace nada». Está demostrado que los TCA se producen de forma más temprana que otras patologías de la salud mental.

Situación actual de las trastornos de la alimentación

Las expertas María Novo, Lucía Fernández, Yésica Seijo y Belén Vázquez explican «tomando datos de determinados estudios la prevalencia en Europa para la anorexia nerviosa se sitúa en 1-4%, 1-2% en el caso de la bulimia nerviosa y entre un 1-4% para el trastorno por atracón,en el caso de las mujeres. En el caso de los hombres la prevalencia total de los trastornos de la conducta alimentarios se encuentra entre el 0.3-0.7%».En España se estima que alrededor de un 4% de los adolescentes padecen algún tipo de trastorno de la conducta alimentaria.

Este tipo de enfermedades afectan mayoritariamente a mujeres, las que representan un 90%. Con todo, su incidencia en hombres se ha ido incrementando. Aunque suelen ser raros más allá de los 40 años, en muchos individuos se cronifican a lo largo de la vida, informan expertos.

Anorexia: definición, tipos, síntomas y consecuencias

El diccionario de la Real Academia Española (RAE) lo define como un síndrome de rechazo de la alimentación por un estado mental de miedo a engordar, que puede tener graves consecuencias patológicas. Sin embargo, las psicólogas de la Clínica Polusa Santo Domingo, explican la anorexia como una enfermedad que se caracteriza por la negación a mantener el peso corporal igual o por encima del valor mínimo normal considerando la edad y la talla. Además de la existencia de un miedo intenso a ganar peso y una alteración en la forma en la que uno mismo percibe su peso.

Hay dos tipos de anorexia, el tipo restrictivo y el tipo purgativo.« En el primer caso, la pérdida de peso estaría ocasionada por métodos como el ayuno o el ejercicio excesivo. El tipo purgativo o también conocido por atracón, la persona mantendría un bajo peso a través de vómitos, uso de laxantes, diuréticos o enemas». Además de todos estos síntomas, pueden aparecer otros efectos físicos derivados de una dieta insuficiente como la caída del pelo o la amenorrea. Ante esto es frecuente la aparición de depresión o ansiedad, explican.

Bulimia nerviosa: definición, síntomas y consecuencias

La bulimia nerviosa es un trastorno de la conducta alimentaria que se basa en la alternancia de episodios de atracones y comportamientos compensatorios «poco apropiados» con la finalidad de prevenir un aumento de peso. Este tipo de comportamientos pueden ser desde un ejercicio excesivo hasta el ayuno. Un atracón se caracteriza por la ingesta de grandes cantidades de comida en un espacio de tiempo reducido acompañado de la sensación de pérdida del control sobre esta dicha conducta, según explican las especialistas.

Las consecuencias de esta enfermedad son «amplias». Las psicólogas destacan la deshidratación, dolores abdominales, problemas digestivos, cardiovasculares y renales como las principales en el plano físico. A nivel mental, las más comunes son un bajo estado de ánimo, ansiedad, aislamiento y dificultades sociales, baja autoestima y dificultades para dormir.

Trastorno por atracón: definición, síntomas y consecuencias

Son muchas las personas que confunden el trastorno por atracón con la bulimia nerviosa. Sin embargo, en este tipo de trastorno no existen ningún tipo de conductas compensatorias. La definición de las expertas recalca la diferencia entre ambas. 

«El trastorno por atracón se caracteriza por la presencia de episodios de atracones o ingestas descontroladas, acompañada de sensaciones como pérdida del control sobre la misma y la cantidad de alimentos ingeridos. También están presenten sentimientos de rechazo hacia estas conductas e incluso hacia el propio cuerpo. En este caso es importante señalar que no existen conductas compensatorias de tipo purgativo, al contrario que en la bulimia».

Las consecuencias más destacadas por las profesionales del campo son los problemas estomacales que conllevan digestiones largas y pesadas, además de alteraciones nutricionales de esta forma de alimentación. «Son frecuentes problemas de tipo afectivo, sentimiento de culpa, frustración e insatisfacción».

Otros TCA no tan conocidos

El grupo de psicólogas destaca el trastorno denominado pica y rumiación. «El primero se caracteriza por un deseo irresistible por comer o por lamer sustancias poco usuales y de escaso valor nutricional. Puede ser el caso de la tierra, yeso, papel, tiza... El segundo, se caracteriza por devolver el alimento a la boca una vez este está ingerido para masticarlo y tragarlo de nuevo. Es importante señalar que en el caso de el último, la rumiación no se debe a ninguna condición médica o física. La persona afectada no lo percibe como un comportamiento poco adecuado», explican.

¿Qué influencia tienen las redes sociales ante este tipo e conductas?

A pesar de todos los beneficios que aportan las redes sociales como la instantaneidad, rapidez, canales de información... Con su llegada también se han incrementado el número de personas con problemas a nivel mental. La necesidad de estar siempre bien y perfecto ha pasado factura. La mayoría de los contenidos e imágenes que se publican están editadas, lo que proyecta una idea distorsionada de la realidad. Aunque cada vez esto es más sabido, es necesario mostrar que no siempre se está perfecta, es necesario enseñar también los momentos malos.

Las psicólogas explican que numerosas investigaciones confirman que las redes sociales ejercen un papel de gran importancia, tanto en el desarrollo como en el mantenimiento de los TCA. «Las redes sociales muestran con frecuencia estilos de vida que pueden resultar perjudiciales. Cuerpos idealizados que favorecen las comparaciones. Imágenes editadas, uso de filtros que eliminan o disimulan todo aquello que se pueda considerar un defecto», expresan. En este contexto se acaban creando unos estándares de belleza generalmente imposibles que generan sentimientos de insatisfacción y frustración.

«En cambio, es importante señalar que los estilos saludables, las fotos sin filtros ni retoques y la aceptación de uno mismo tal y como es, empiezan a tener más cabida en las redes sociales», informan.

¿Es necesaria la ayuda de varios especialistas para tratar cualquiera de estas enfermedades?

Las profesionales del Hospital Polusa Santo Domingo, indican que los trastornos de la conducta alimentaria son «complejos» y «afectan a numerosas esferas». Esto perjudica a la salud física y mental, provocando una deterioración en las relaciones con los demás, del mismo modo a la aparición de dificultades en el ámbito laboral y educativo. «Por este motivo es fundamental que el tratamiento sea multidisciplinar (psiquiatras, psicólogos, nutricionistas, otros médicos especialistas, etc..)». La familia es otro factor muy importante en lo relativo al tratamiento de un TCA , por lo que es imprescindible su «implicación» y «colaboración» en el proceso de recuperación, informan las especialistas.

Asociaciones en la provincia de Lugo

En enero se presentó el grupo de apoyo Retómate en Lugo, está formado por familiares de personas con TCA. Su objetivo principal es brindar su experiencia para ayudar a personas que están pasando por situaciones similares.

Las expertas señalan la asociación CIOR Galicia (Asociación de Prevención y Ayuda a los Trastornos de la Conducta Alimentaria). Se encuentra en Monforte y ofrece sus servicios a toda la provincia.