Lugo, a la cabeza de Galicia en accidentes laborales mortales: «El sector primario es mucho más hostil que una oficina»

André Siso Zapata
André S. Zapata LUGO / LA VOZ

LUGO

Imagen de archivo de una obra del sector de la construcción
Imagen de archivo de una obra del sector de la construcción Sandra Alonso

Los datos del Ministerio muestran que supera a las otras tres provincias en fallecimientos por 100.000 trabajadores con 6,6 al año. Los expertos señalan a la falta de prevención y a la premura en los oficios como causas principales

02 mar 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Cada año, cerca de 3.000 personas sufren un accidente durante su jornada de trabajo en la provincia de Lugo. Las consecuencias de estos incidentes van desde los daños leves, que apenas repercuten en días de baja, hasta sucesos mortales. Los expertos inciden en la importancia de la prevención de riesgos laborales en una provincia en la que la gestión de animales, el manejo de maquinaria y los empleos de carácter físico componen una gran parte del empleo. 

Los datos publicados recientemente por el Ministerio de Trabajo son muy claros: el año 2023 fue el peor de la serie reciente en cuanto a incidentes laborales. Así lo reflejan las cifras, tanto en lo referente a la gravedad como al número total.

El año pasado, 3.276 trabajadores resultaron heridos tras un incidente en durante su jornada laboral. 3.014 fueron en su puesto de trabajo, mientras que 262 notificaron accidentes de camino a su empleo o a su casa tras terminar la jornada. La gran mayoría fueron sucesos leves (2.947), pero 59 de ellos fueron considerados graves. Ocho personas perdieron la vida, más que en cualquiera de los años anteriores.

La diferencia también es considerable a la hora de distinguir entre asalariados y autónomos. 2.878 de los heridos pertenecían al primer tipo, mientras que solo 398 (uno de ellos fallecido) era trabajador por cuenta propia. Las cifras totales superan a las del 2022 (2.972 accidentes y 7 fallecidos) y a las del 2021 (2.968 heridos y 5 víctimas mortales).

La agricultura, la industria y los talleres lideran

El informe del Ministerio de Trabajo muestra incluso cuáles son los sectores más afectados. En la provincia de Lugo, las cifras corroboran lo que dice la lógica: los trabajos donde el esfuerzo físico es mayor son más propensos a protagonizar accidentes laborales. 

El documento coloca por encima del resto a la agricultura, la ganadería y el sector pesquero. En esta sección, 434 profesionales resultaron heridos en accidentes laborales durante el año 2023. Estos sectores son punteros en la provincia y movilizan mucha mano de obra, por lo que es lógico que lideren también esta estadística.

Seguidamente, el informe coloca a la industria, el sector secundario. Es las empresas de esta sección —mucho más general y donde se entra menos al detalle en el informe—, 410 personas resultaron heridas. Se coloca por encima de los talleres mecánicos y las reparaciones, con 406, un trabajo muy peligroso por la gran cantidad de maquinaria que se usa y el tipo de material que se maneja. También destaca el Ministerio la labor de los sanitarios, con 303 heridos, un oficio que a priori no parecería de tanto riesgo. 

La cuarta de Galicia en número total, pero primera en proporción

Lugo es la provincia gallega en la que hubo menos accidentes laborales durante el año pasado en términos porcentuales, con 2.507 por cada 100.000 trabajadores. Sin embargo, si se observa la gravedad de los mismos, es en la que se produjeron más incidentes mortales por cada 100.000 trabajadores, con 6,6 al año. Está muy por delante de A Coruña (4,92), Ourense (4,86) y Pontevedra (4,14).

Para buscar las causas de esta gran mortalidad, la sexta de España, solo por detrás de Teruel, Cuenca, Soria, Lleida y La Rioja, hay que ir a la esencia del tipo de trabajo que se desarrolla en mayor medida en Lugo.

«El coste de tiempo y dinero que te supone garantizar el bienestar de los trabajadores es mucho menor que el coste de que se pierda una vida»

Mejor que nadie lo saben los profesionales que se dedican a estudiar y a gestionar los casos de trabajadores heridos. Desde la empresa MPE Prevención de Riesgos Laborales, situada en Lugo, Pablo González, el director de la oficina, explica que «el terreno en el que se realizan los trabajos del sector primario, muy popular en la provincia, es mucho más hostil que el de una oficina». 

González destaca las profesiones en las que se trabaja con animales, «que son imprevisibles y pueden causar muchos daños», y con maquinaria, «que siempre entraña grandes riesgos». Los atrapamientos, las caídas y los golpes suelen completar el podio de incidentes más habituales. 

En cuanto a la gravedad, González explica que, «afortunadamente, la mayoría de casos que nos llegan son leves». Sin embargo, hay sectores en los que la gravedad va casi ataviada a cualquier incidente. «En los accidentes forestales, por ejemplo, si te llega un caso ya sabes que va a ser algo serio, porque casi siempre son caídas de altura, cortes graves o golpes fuertes», indica. 

La prevención, que es a lo que se dedican en MPE, es algo «vital», defiende el director del negocio. «Suele haber premura por acabar muchos trabajos, y eso hace que no se tomen las medidas de seguridad pertinentes. Es una pena, porque el coste de tiempo y dinero que te supone garantizar el bienestar de los trabajadores es mucho menor que el coste de que se pierda una vida», resume.

Una vez ha ocurrido un accidente, González explica que el interés de todos los implicados «suele centrarse en el proceso de rehabilitación y los plazos para regresar al trabajo». Sin embargo, «cuando ha habido alguna irresponsabilidad, también prestan mucha atención a las posibles indemnizaciones», termina el lucense.