Así se investiga un incendio forestal

TANIA TABOADA LUGO / LA VOZ

FRIOL

CARLOS CASTRO

Dos agentes de investigación de incendios explican la labor para establecer la causa de un fuego y su autoría

25 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

En pleno incendio forestal y una vez extinguido, acuden al lugar para visualizar y recoger todo tipo de pruebas. Son los agentes de la unidad de investigación de incendios, rama que se nutre del Seprona y de seguridad ciudadana. Viajamos con una patrulla a un monte de Friol donde hace dos meses ardieron cinco hectáreas de superficie.

A pie del terreno, estos guardias explican la labor que desarrollan para determinar la causa y la autoría de un incendio forestal. «Nuestro trabajo comienza desde el momento en que recibimos la alerta. Iniciamos un protocolo, basado en tres pilares: recogida de datos históricos y meteorológicos, determinación de la geometría del incendio y aplicación del método de las evidencias físicas. Este último permite reconstruir el incendio a través de la lectura e interpretación de los vestigios dejados por el fuego en su avance», explican los agentes, quienes añaden que esos vestigios son las marcas y señales que se produjeron sobre la vegetación y el medio físico, hasta localizar el punto o puntos de inicio del fuego. «Dentro del área de inicio se puede establecer el punto concreto. Es algo muy difícil y que solo se establece cuando aparece un artefacto», indican. Una vez establecida el área de inicio, la acordonan y llevan a cabo el tamizado. De rodillas, van peinando la zona para localizar el artefacto, que puede ser acelerante o retardante (vela).

Colaboración con brigadas

Por último, se establece el cuadro de indicadores de actividad: el registro de todas las evidencias físicas humanas, presentes en la zona de inicio y confrontadas entre sí, que posibilitan la clasificación de la causa que provocó el fuego y que constituye la prueba material. La prueba personal se basa en la manifestación de testigos e interrogatorio de sospechosos. Los guardias están capacitados para hacer ambas, pero es aquí donde entra la colaboración con las brigadas de la Xunta, agentes con los que trabajan codo con codo. «Nós facemos a proba persoal, que consiste na instrución de dilixencias, entrevistas coa xente, cos primeiros medios en chegar... e as brigadas fan o informe técnico», indican estos guardias, que definen el servizo de prevención de incendios de Lugo como el mejor de España. «É o mellor de España con moita diferenza. Isto percíbese nos tempos de reacción, na súa veteranía; saben apagar lumes, coñecen a zona...», concluyen.