Sustituyeron a las chabolas levantadas en los años 70 del siglo pasado
23 may 2015 . Actualizado a las 08:37 h.En la capital lucense, en el actual período democrático, se ejecutaron dos proyectos relevantes para la eliminación de infraviviendas, de chabolas, y la construcción de casas dignas. El primero de ellos fue el de O Carqueixo; el otro, el de A Croa. El poblado de O Carqueixo, camino de cumplir un cuarto de siglo, no parece correr el riesgo de desaparecer pese a que hubo intentos desde la administración municipal de conseguirlo. Los adjudicatarios de las casas de A Croa, más de 15 años después de ocupar las viviendas siguen sin disponer de las escrituras de propiedad.
Oficialmente, la construcción de las viviendas de O Carqueixo, que sustituyeron a las chabolas en las que vivían entonces los residentes en este poblado gitano, finalizó el 13 de diciembre de 1991. En la práctica, las casas estaban acabadas, o prácticamente terminadas, unos meses antes, porque fueron inspeccionadas por Vicente Quiroga, en calidad de alcalde. Por tanto, en el próximo año se cumplirán 25 años de la construcción de estas casas. Y allí siguen. El carácter provisional que debían de tener se convirtió en definitivo, o, por lo menos, mucho más duradero del que la Administración preveía inicialmente.
Desde el Ayuntamiento, en los últimos años, se intentó el traslado paulatino de los ocupantes de las viviendas a otras casas, en un proceso de integración. Hubo avances. Las casas que quedaron libres por el citado procedimiento fueron demolidas, como lo fueron en varias ocasiones las chabolas levantadas en el poblado. Pero queda aún mucho por hacer y O Carqueixo no deja de ser noticia desde el punto de vista de incidentes como incendios y, recientemente, por una operación de la Policía Local para recuperar material de distinto tipo.
A su vez, en A Croa, los adjudicatarios de las viviendas, no acaban de ver el día de conseguir las escrituras de propiedad. La Administración no hizo bien las cosas en su día y en la actualidad encuentra muy serias dificultades para regularizar la cuestión de la propiedad.
Agua sí, escrituras no
Uno de los vecinos señaló recientemente que no tienen los títulos de propiedad, pero sí tienen que pagar el agua, porque de ese aspecto sí se preocupó el Concello. Se quejan de que los servicios municipales de limpieza y de jardinería apenas pasan por esta parte de la ciudad.