Los oncólogos buscan fórmulas para que los pacientes expresen sus miedos y sentimientos
28 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.En el área de Lugo se diagnostican mil nuevos cánceres cada año. Para los pacientes es un duro golpe que genera muchas inseguridades, dudas y un mar de preguntas, vinculadas a una especialidad, la oncología, que está asistiendo a un aumento de la supervivencia. La colaboración entre este servicio, al que se han incorporado especialistas muy jóvenes como Natalia Fernández Núñez, y Humanización Hospitalaria, ha supuesto la organización de talleres, como los de maquillaje, alimentación y más recientemente de creación artística, que pretenden implicar a los pacientes y facilitarles herramientas de apoyo en momentos complicados.
-¿Cuál es el objetivo de estos talleres?
-En general, pretendemos ayudar a nuestras pacientes en el proceso oncológico, que sabemos que es muy duro, acompañarlos. Creemos que es algo positivo. En el taller que hubo de relicarios había en tratamiento y otros en seguimiento. Es bueno que se relacionen para que intercambien experiencias y se abran. Nuestro objetivo es crear un ambiente íntimo para que expresen lo que no nos transmiten en las consultas. En los talleres están más relajadas y eso ayuda a expresar sentimientos y miedos.
-Habla en femenino. ¿No acuden hombres?
-Está abierto a todo el mundo. Lo cierto es que, por ahora, la mayoría son mujeres. En el primero, el de maquillaje, quizá por la temática se prestaba más a ello. Pretendemos que sea un foro de ayuda para expresar lo que cada uno siente. En ellos pensamos que se da un ambiente más propicio para las preguntas y para consultar las dudas. En esta iniciativa estamos empeñados en integrar a oncólogos, asociaciones, pacientes en tratamiento, en seguimiento...
-¿Los pacientes acuden a los talleres a informarse de lo que no se atreven a preguntar en las consultas?
-Depende. En el de nutrición sí hubo personas que querían que les aportáramos información. El de arte es quizá más emocional para hablar de la enfermedad y de las esperanzas. Vamos a hacer más de información al paciente. Hacemos talleres desde hace un año y la idea es continuar y elaborar un calendario.
-¿Qué preguntan en las consultas?
-Hay pacientes que son claros y directos desde el primer momento. Otros no preguntan y solo quieren saber hasta un punto. Depende del carácter y de la persona. Nos encontramos también con mucha protección familiar.
-¿Cree que deben de estar informados?
-Sí. Sin duda, aunque al principio sea más duro. Saber te permite entender por qué te ocurren cosas. Cuánto más conozcas de la enfermedad y de la situación, más te va a ayudar a obtener respuestas.
-¿Qué es lo que no se atreven a preguntar?
-Nuestro objetivo es que pregunten y que no haya temas inabordables. Estamos dispuestos a dar respuesta a todo lo que nos pregunten. A veces llegan a las consultas bloqueados, sobre todo si vienen a buscar resultados. Sabemos que traen un montón de preguntas, pero hacen una o dos. Por esa razón yo siempre les recomiendo que escriban en una libreta todas las dudas y que no salgan sin haber recibido respuesta a todo lo que quieran saber. Estamos dispuestos a hablar de todo, sin tabúes.
-¿Incluso de sexualidad relacionada con la enfermedad?
-De todo.
-¿Preguntan sobre eso?
-Algunos sí y otros no. Los tratamientos tienen efectos secundarios y pueden afectar a las relaciones. Generalmente nos preguntan si es bueno o malo mantenerlas y cómo se pueden mejorar. Depende en parte de con quien vengan a la consulta les resulta también más fácil abordarlo o no. Eso influye en gran medida. Muchas mujeres nos consultan sobre sequedad vaginal y sobre si es malo o bueno y si deben mantener relaciones sexuales.
-¿Cuál es la respuesta?
-La respuesta es sí y si tienen alguna duda, que pregunten. Siempre les recomendamos, una vez que empiezan el tratamiento, que hagan la vida lo más normal posible, que no intenten cambiar las rutinas, dentro de las posibilidades.
«Hay pacientes que son claros y directos desde el primer momento. Otros no preguntan»
«Siempre recomendamos que, dentro de lo posible, hagan vida normal»