Homenaje a Ovidio Cadenas, el lucense que fue embajador de Galicia en Madrid

Xosé María Palacios Muruais
XOSÉ MARÍA PALACIOS LUGO / LA VOZ

NEGUEIRA DE MUÑIZ

Ovidio Cadenas Queipo estuvo al frente de la Xuntanza durante más de treinta años.
Ovidio Cadenas Queipo estuvo al frente de la Xuntanza durante más de treinta años. CEDIDA

Un parque de Alcobendas, ciudad donde vivió muchos años y desarrolló gran actividad social, lleva su nombre desde este sábado

21 abr 2023 . Actualizado a las 19:39 h.

Ovidio Cadenas Queipo nació en Ernes (Negueira de Muñiz) en 1945 y murió en Alcobendas en el 2021. La suya es una más de las muchas vidas que cambiaron Galicia por otros lugares debido a la emigración, pero es también mucho más que una trayectoria personal. 

En Madrid tuvo un trabajo y formó una familia, pero desarrolló una gran actividad como impulsor y responsable de la Xuntanza de Galegos en Alcobendas, que agrupa a gallegos residentes en esa zona del norte madrileño.Un parque de esa ciudad, hasta ahora denominado Parque de Galicia, quedará desde este sábado unido a su nombre, y pasará a llamarse Parque de Galicia-Ovidio Cadenas Queipo.

Su vida y su familia estuvieron marcadas por la construcción del embalse de Salime, que a mediados del siglo pasado anegó terrenos y pueblos de municipios del curso alto del río Navia, tanto de Galicia como de Asturias. La obra motivó el traslado de bastantes familias a la Terra Chá, en donde se asentaron como colonos en zonas de Castro de Rei y de Cospeito para dedicarse a la ganadería. Ovidio era el segundo de cuatro hermanos, y él y la mayor, Alicia, no se trasladaron a Veiga de Pumar (Cospeito) para iniciar una nueva vida sino que se marcharon a Madrid.

Maite García Cadenas, sobrina de Ovidio Cadenas, explica que su tío volvía a Galicia siendo ya emigrante en Madrid. Conservó «siempre, siempre» ese vínculo con la tierra de origen, y ella recuerda el tiempo que pasaban juntos cada verano, cuando él visitaba a los familiares que se habían establecido en Veiga de Pumar. Su amor a Galicia lo convirtió, como a muchos otros, en un embajador de Galicia en la capital de España, en donde extendió a otros ese cariño.

Su mujer, Consuelo Redondo, era de Riaza (Segovia) y murió en enero del 2020. Maite García Cadenas recordaba este viernes que ese origen castellano no le había impedido convertirse en gallega de adopción. El matrimonio tuvo dos hijos, que viven en Madrid.

En el taxi y en Barajas y con muchos conocidos

Ovidio Cadenas pronto empezó a trabajar de taxista tras cambiar las orillas del río Navia por las del Manzanares. Luego extendió su actividad profesional al aeropuerto de Barajas, aunque sin abandonar el taxi, cuya conducción compartía con empleados. La Xuntanza de Galegos en Alcobendas, creada a finales de los ochenta, fue una entidad a la que dedicó años de atención y de cariño, algo que el Ayuntamiento de Alcobendas reconoce dándole nombre a un parque. Como presidente, estuvo al frente del colectivo más de 30 años.

La citada entidad desarrolla en Madrid una variada actividad en la que no falta la parte gastronómica, con una fiesta del marisco y un magosto como expresión del apego a costumbres gallegas. Un coro y clases de baile demuestran, por otro lado, la variedad de actividades que promueve.

Maite García Cadenas reconoce que el acto de este sábado es un motivo de orgullo para la familia, que ha recibido con gran satisfacción esa decisión de la corporación de Alcobendas.