Galicia y el País Vasco difieren en la fecha de la apertura de la xarda

La costera de la xarda sigue provocando roces entre las flotas de las distintas comunidades del Cantábrico. Aunque no parece que este año vayan a repetirse los incidentes que el reparto del cupo provocó el año pasado -que llegaron a su punto álgido a mediados de marzo frente al Parlamento de Galicia, con violentos enfrentamientos-, sigue habiendo diferencias entre las distintas comunidades que participan en la costera. Y no solo por el criterio empleado para decidir qué cuota corresponde a cada comunidad autónoma -los tribunales dirán si hay que cambiarlos-, si no que discrepan incluso en la fecha sugerida para el inicio de la campaña. Un arranque que sería solo para el cerco y las artes menores, puesto que el arrastre ya puede pescar la especie desde el pasado día 19.

En el borrador de resolución que la Secretaría General de Pesca del Ministerio de Agricultura ha remitido a las cofradías de pescadores se sugiere para el inicio de la campaña el próximo lunes, 2 de febrero. Una fecha que los gallegos ven demasiado próxima en el calendario: «En Galicia non estamos de acordo coa data», adelantó Tomás Fajardo, presidente de la Federación Galega de Confrarías.

La flota gallega, al menos la de artes menores, prefiere retrasar el inicio de la costera. Lo ideal, a su juicio, sería «a mediados de marzo e incluso tirando hacia abril, que é a mellor época». Finalmente, en las alegaciones que la federación gallega envió ayer a Madrid, la propuesta fue la de empezar la costera el 23 de marzo. El año pasado, la temporada arrancó con la primavera, el 21 de marzo, retrasada por los incidentes que provocó el reparto de la cuota.

Migración de la especie

De que cuanto más tarde, mejor para Galicia no hay duda, dados los patrones migratorios de la xarda. En la esquina más occidental del Cantábrico, la caballa suele aparecer en abundancia en torno a abril. De hecho, no es la primera vez que se agota la cuota de España antes de que la especie alcanzase las aguas gallegas, obligando así a los barcos con base en la comunidad a tener que tirar por la borda todas aquellas xardas que caían en sus aparejos porque no disponían de cupo.

Eso ocurría antes de que, el año pasado, Madrid repartiese la cuota global de España por provincias. Se hizo, además de para frenar la pesca olímpica, para evitar en lo posible desplazamientos arriesgados, como los de las embarcaciones menores que cada costera ponían proa hacia el este del Cantábrico -e incluso desplazaban el barco en remolque- para poder participar en la costera del verdel, como se conoce a la caballa desde Cantabria al País Vasco.

Con el reparto por provincia, la cuota está asegurada para la flota gallega, independientemente si los vascos, los cántabros o los asturianos inician la costera antes.

Volviendo a la cuestión de la fecha: «É a que suxiren os vascos», dice Fajardo. Y es la que la Secretaría General de Pesca ha recogido en su borrador. «Parece que os cántabros tampouco están moi de acordo», añadió.

Una costera marcada por la caída de casi un 25?% en los cupos de pesca

Si la fecha no gusta, la cantidad, todavía menos. Por lo de pronto, las toneladas, aunque provisionales, son menos que las del año pasado. Por debajo de ese 15 % que, según los cálculos que hizo el Gobierno a la salida del Consejo de Ministros de Pesca de diciembre -en el que se repartieron las cuotas entre los Veintiocho-, había caído el TAC (total admisible de capturas) de xarda para el 2015. Echando cuentas, al cerco le faltan 894 toneladas de caballa, «unha verdadeira barbaridade», en palabras de Andrés García, portavoz de Acerga (Asociación de Armadores de Cerco de Galicia), para una flota compuesta por 154 embarcaciones que ya pasa apuros con la sardina, el jurel y, los que están a punto de convertirse en endémicos con la xarda.

También las artes distintas de arrastre y cerco echan de menos las cifras del año pasado. «Aínda que as cifras son provisionais, botando cálculos parece que o cupo gallego caeu case un 25 % con respecto ao que tiñamos o pasado», dice Tomás Fajardo. La flota confía en que pueda haber un incremento a mitad de campaña, como el ejercicio pasado, que tras cerrar el acuerdo con las Feroe se repartió un remanente. En cuanto a cómo gestionará Galicia las toneladas que le corresponden, la flota de artes menores se reunía ayer para estudiar la fórmula. En el caso del cerco, Andrés García explicó que los socios de Acerga (107 barcos) realizarán una gestión conjunta. El resto, tendrá que decidirlo, y los 14 que el año pasado optaron por la fórmula individual, revalidarla, si quieren seguir el mismo sistema.

 

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