Ser cantante «on-line»: y forrarse con ello

Sara Romero PEKÍN

MERCADOS

sara romero

En tres meses una página web china de actuaciones en directo ha recaudado cerca de 160 millones de euros

04 oct 2015 . Actualizado a las 09:02 h.

Como cada día, Ao Yuan se sienta frente a su ordenador, se pone los cascos, nivela su micrófono hasta la altura de su boca y enciende la webcam. Antes de iniciar sesión en el servidor Bobo.com, una suerte de YouTube especializado en artistas on-line como ella, comprueba que sus pestañas postizas están bien colocadas y vuelve a aplicarse la barra de labios rosa fucsia. Con este ritual, que repite de lunes a viernes, inicia su jornada de trabajo ante sus más de quince mil seguidores. Dos horas de actuación en directo cada día le reportan unas ganancias de unos 3.500 euros cada mes.

Y todo esto sin moverse de su casa, un piso de 90 metros cuadrados, luminoso y con una decoración occidental que pocas jóvenes de su edad hoy en día pueden tener en propiedad en Pekín, donde el precio de las viviendas no deja de subir. Ella es la cantante más famosa de la página web para la que trabaja, donde hay contratados ya más de diez mil artistas.

La competencia

«Llevo más de diez años formándome como cantante, pero hoy en día es muy difícil ganarse la vida en el mundo de la música porque hay mucha competencia. Me enteré de que hay empresas que contratan a gente como yo y ahora puedo ganar mucho dinero mientras sigo estudiando», cuenta Ao Yuan a La Voz mientras atiende las peticiones de sus fans.

En el último año, han surgido en China decenas de páginas web que ofrecen actuaciones en directo a todas las horas del día. Además de cantantes, hay humoristas, cuenta cuentos o malabaristas. De un catálogo de espectáculos, basta con pinchar en el que nos gusta y se abre una página colorida, con una pantalla en el centro. A ambos lados de la pantalla aparecen los mensajes que los seguidores escriben a los artistas y justo debajo, en una especie de cajón, van cayendo regalos virtuales en forma de soles, corazones o flores.

«Esos regalitos virtuales son en realidad el dinero que los fans pagan por cada actuación. Cada uno ofrece la cantidad que quiere y con ese dinero, se calcula el salario mensual del artista», nos explica Hao Hao, administradora de la web Bobo.com. Según ella, el secreto del éxito de este formato radica en que «en China hay mucha gente que quiere ser famosa y a la vez millones de internautas que buscan alguien con quien hablar y divertirse. Por eso está triunfando esta industria».

Para confirmar esa rentabilidad de este nuevo negocio en auge, basta con fijarse en los números de la página web YY.com. Es el servidor de este tipo más popular en China y durante los tres primeros meses del año consiguió recaudar cerca de 160 millones de euros.

Pocos minutos después de empezar a cantar, Ao Yuan ya ha recibido más de un centenar de regalos virtuales. «Las baladas chinas son las que más les gustan, aunque cada vez me piden más artistas internacionales como Shakira», nos dice entre tema y tema. Aprovecha unos segundos de música instrumental para tapar el micrófono y confesarnos un deseo que comparte con la mayoría de los artistas on-line como ella: «en el fondo, mi sueño es poder subirme un día a un escenario y poder ver las caras de mis admiradores en persona».