José Enrique Rodríguez Coello: «La sostenibilidad no está reñida con los resultados de las empresas»

El director de Aenor Galicia explica la importancia que tienen las certificaciones internacionales para las empresas ante una sociedad que cada vez tiene un mayor volumen de demandas y que reclama apostar por modelos de sostenibilidad y buen hacer.

—¿Qué balance hace del 2023?

—Los resultados son positivos en el sentido de que la sociedad y las empresas demandan algún tipo de evaluación de confianza de los servicios o productos que están poniendo en el mercado. Los estándares de calidad van definiendo más requisitos que apoyan este valor de confianza de cara a los clientes. Nuestra labor es generar certidumbre a través de estándares referenciales, reglamentos o normativas que puedan definir la prestación del servicio o la fabricación de un producto.

—¿Es una tendencia la demanda de estas garantías por parte de empresas y sociedad?

—La demanda social requiere a las empresas el poder formular referenciales de confianza. Cada vez más sectores se van sumando a estas cuestiones y nosotros somos un compañero de viaje que pretendemos participar como colaboradores. El reconocimiento de la marca Aenor tiene un nivel de conocimiento del 80 %. La sociedad, al ver la marca Aenor, lo identifica con calidad y eso posiciona a nuestros clientes permitiéndoles una diferenciación frente a competidores.

—¿Cuál es el valor añadido que aporta Aenor?

—Tenemos una marca de prestigio en el mercado y con solidez gracias al trabajo de estos años. El nivel de exigencia o de reconocimiento de nuestro trabajo lo refleja el mercado. Estamos recibiendo nuevas demandas de servicios y soluciones, somos una organización muy proactiva en estas cuestiones.

—¿Los resultados refuerzan vuestra labor?

—Las palabras Aenor, confianza y calidad van muy unidas y es fruto del trabajo de muchos años. Me gusta que nos sientan como un compañero de viaje y de ver a medio o largo plazo cómo vislumbramos el futuro y qué podemos aportar. Algo muy importante que nos refuerza es el personal propio, lo que implica un conocimiento increíble. Nuestros competidores suelen trabajar con colaboradores puntuales, pero nosotros apostamos por un modelo de continuidad y comunicación directa con el cliente los 365 días del año.

—Ser compañero de viaje crea un gran nivel de exigencia.

—Lo nuestro es un matrimonio con alta perdurabilidad en el tiempo, ante su demanda aportamos nuestro conocimiento y garantía. Nos llaman para afrontar nuevos proyectos y nosotros trabajamos en todo el mundo, estamos presentes en más de 100 países; Aenor es una marca de confianza. Cuando un cliente va con un certificado nuestro tiene reconocimiento en China, Japón o a donde vaya; eso contrasta la labor que estamos realizando.

—La certificación sobre la huella de carbono es una de las que más está creciendo.

—Se está produciendo una evolución en la que empezamos con un proceso de certificación de sistemas de producción o prestación de servicios y estamos entrando en una dinámica de valores. Estos son los que diferencian a las empresas u organizaciones. La huella de carbono es una primera piedra en este tipo de cuestiones y el apoyo de las Administraciones públicas es importante. 

—¿El sector maderero y ganadero también se están sumando para obtener certificaciones?

—No diría que ahora, el maderero tiene un potencial muy importante. Hay una serie de normas de cadena de custodia o gestión forestal que llevan muchos años vigentes. Estamos teniendo una demanda del sector muy importante, está muy implicado. En el caso del ganadero, el mercado les está requiriendo compromisos de este tipo, bien por temas de seguridad alimentaria o de bienestar animal.

—¿Qué relevancia tiene la inteligencia artificial?

—Es muy reciente; en febrero salió la ISO 42001 de sistemas de gestión de inteligencia artificial. Ante determinado tipo de demanda, se buscan contrastes técnicos o referenciales que puedan establecer unas pautas. El sector TIC evoluciona a una velocidad impresionante y las organizaciones intentamos definir pautas que establezcan confianza y seguridad. Es un mundo muy vivo y hay cuestiones que ahora ni nos planteamos y en dos años estaremos definiéndolas.

—En Galicia experimentó un crecimiento notable la ISO sobre el sistema de gestión de continuidad del negocio. ¿Por qué?

—Cuando se habla de sostenibilidad, se habla de tres patas: medioambiental, social y buen gobierno. En esta última existe una demanda cada vez mayor por parte de las organizaciones de poder garantizar su futuro. Establece unas pautas que repercuten a largo plazo. Hay normas internacionales, como las de compliance, y nosotros estamos desarrollando un índice de buen gobierno para hacerles llegar este estándar.

—¿La apuesta de las empresas por la sostenibilidad es decidida?

—Estas cosas vienen para quedarse y no es cuestión de modas. Esto repercute en los resultados de las empresas, tanto sociales como económicos. Las organizaciones apuestan por estos modelos porque son de mejora e influyen en la cuenta de resultados. Desde ese punto de vista, la sostenibilidad no está reñida con los resultados, en absoluto. Compromisos de sostenibilidad pueden ser una optimización del uso de combustibles o un mayor aprovechamiento de materias primas.

—También están creciendo la igualdad de género, la diversidad o la inclusión.

—Detectamos una demanda de las organizaciones de ir más allá del mero compromiso del cumplimiento legal. Hacen actuaciones mejorando esos compromisos y establecemos pautas para poner en valor esa diferenciación o apuesta por hacerlo mejor.

—¿El buen gobierno y la gobernanza marcarán a las empresas del futuro?

—Son pilares que van a estar ahí; vemos movimientos en los que definen las estrategias de futuro en función de modelos contrastados de experiencia y conocimiento. Son pautas verificadas por resultados.

—¿Y en qué cuestiones sustentan estos aspectos?

—En cualquiera que esté relacionada con la viabilidad del futuro de la organización. No solo desde el punto de vista autonómico, de compromiso con el entorno, sostenibilidad, etc.

«Galicia está en el pelotón de cabeza» 

Las empresas gallegas buscan un mejor posicionamiento en el mercado a través de sellos de garantía como las certificaciones. El director de Aenor Galicia destaca el alto nivel de iniciativa de las compañías de la comunidad y la apuesta por modelos contrastados que les aportan una diferenciación.

—¿Qué particularidades o señas marcan a las empresas gallegas?

—Contrariamente a lo que pensamos los gallegos de nosotros mismos, tenemos un nivel de iniciativa muy importante, esto se demuestra cuando vamos por ahí adelante. La existencia de grandes organizaciones de reconocido prestigio internacional lo certifica. La empresa gallega va apostando por modelos contrastados y que aportan diferenciación. Cuando estás en determinados mercados, sobre todo internacionales, estas pautas ayudan a interiorizar y a demostrar como si fueran tu carné de identidad. Los datos de Galicia los comparamos con el producto interior bruto y, en certificación, estamos por encima de la media.

—¿Y en comparación con otras comunidades?

—En cuanto a número de certificaciones estamos en el pelotón de cabeza. Lo que notamos es la apuesta por el proceso de internacionalización y búsqueda de mercados, también con apoyo de las Administraciones públicas, que es imprescindible para realizar esta apuesta.

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