Conservar cotizantes

Manuel Blanco Desar
Manuel Blanco Desar EL SÍNDROME G

OPINIÓN

06 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Los meses van pasando y seguimos hablando de todo, menos de lo urgente y lo vital. De lo importante sí que hablamos. ¿Qué es lo importante? Pues lo que dice la importante gente que sale en la tele. Vean los telediarios, cojan un papel, hagan tres columnas y clasifiquen los asuntos: vital, urgente, importante. Apuesto que la tercera columna pronto se verá desbordada con chuscadas. De las pensiones, de que mueren más ciudadanos que los que nacen, de la escasa amortización de la deuda pública… De eso, nada. Se habló hace unos meses, pero ya llegó la primavera, hay más sol, pronto será verano. Somos así. Dicen que hay unos señores hablando de algo en Toledo, pero ponga otro par de cañitas. Este mes, por cada pensionista tendremos menos de dos cotizantes -1,89-. Cada cotizante tendría que pagar mil euros anuales más para abonar pensiones sin endeudarnos. Pero todos tranquilos. Para el 2017 arreglamos con lo que queda de hucha y un crédito. ¿Y para el 2018? Para el 2018 falta mucho. Otro par de cañitas. Ya no digo para el 2020, 2025 o el 2030. Pensar a tan largo plazo es de gente sosa, tipo alemanes, escandinavos o anglos. Servidor, en su ignorancia, creía que en esto el largo plazo era al menos una generación, o sea, 30 años, edad en la que el personal comienza a tener hijos en España. Es que tanto europeísmo lesiona las meninges.

Así que lo de las pensiones es urgente, pero no se hablará hasta la extra de verano. Entonces comenzarán algunos agobios, que se disiparán en la playita. Hacia Navidades llegará una carta de Bruselas diciendo que muy mal eso de endeudarse para pagar recurrentes gastos corrientes, y que nos olvidemos del truco en adelante. Ya sabemos que el pérfido holandés calvinista cree que nos gastamos todo en vino y mujeres, o en lo que sea, whisky y chicos/as, ahora que nos abandonó el gran Manolo Escobar: «Viva el vino y las mujeres, que por algo son regalos del Señor». Conste que lo cito con respeto, porque no me avergüenzo de ser fan de mi tocayo, comenzando por Madrecita María del Carmen.

Esto es lo urgente por arreglar. Pero igual que se tapan las goteras con remiendos, asegurar el tejado requiere otra cosa. Eso ya es vital, porque los inviernos se sucederán y las pulmonías son criminales. De lo vital tampoco se habla. Vital y urgente es que comencemos a asegurar que los jóvenes cotizantes sigan cotizando, y que sientan como suyo el sistema. De ahí que haya que introducir novedades, como que cada cotizante pueda asignar directamente parte de su cotización a un pensionista. ¿Revolucionario? Pues sí, pero para bien. Es mejor que las cuentas nacionales o los fondos privados complementarios. Según un estudio del IESE, en 15 años solo 18 fondos españoles de entre 632 operativos tuvieron una rentabilidad superior a la de los bonos del Estado, e incluso 82 tuvieron rentabilidad negativa. Estimular que los cotizantes paguen por sus padres, para que mañana sus hijos hagan lo propio, ayudaría a cohesionar el sistema.