No es ciencia ficción

OPINIÓN

10 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Gracias a los increíbles avances de la ciencia y la tecnología, vivimos una explosión de posibilidades sin igual, porque a la intensidad y extensión de los avances se une la fabulosa rapidez con la que están sucediendo. Una semana sí y otra también, el suplemento dominical de este periódico nos lo viene contando. Se habla ya de un futuro poshumano, un salto cuantitativo y cualitativo en la evolución muchísimo más poderoso que el de neandertal a sapiens, una nueva criatura fruto de la hibridación con los ordenadores. El filósofo francés Luc Ferry nos lo cuenta bien en su libro La revolución transhumanista, que acaba de llegar a las librerías españolas. 

Frente a todo ello, ni el pesimismo ni el optimismo son actitudes correctas. Lo que debe preocuparnos, como traté de explicar hace un par de años en mi libro Bioética y neurociencias, es producir la suficiente sabiduría para tomar buenas decisiones. Esto no se puede conseguir centrando la educación en las llamadas STEM (science, technology, engineering and mathematics), como están haciendo la mayoría de los sistemas educativos del mundo, el nuestro incluido.

Resultan imprescindibles las humanidades, como reclaman intelectuales de todo el mundo, sin éxito, porque por desgracia nuestros políticos no tienen ni idea de la que se nos viene encima, todo hay que decirlo.

¿Hará una política diferente el filósofo Emmanuel Macron?